La filial del Grupo Prisa está tratando de hacer lo posible por recuperar el aliento perdido y apresurar las últimas sesiones del año para conseguir terminar 2007 en positivo. De hecho acumula un retroceso del 5 por ciento en los últimos doce meses. Después de tomarse vacaciones el 6 de diciembre, cuando sus títulos se desplomaron hasta su mínimo anual, en los 22,1 euros, el valor sufre un rebote del 16 por ciento. Primero tomó impulso de la mano de la especulación de que Vivendi -que controla un 5,498 por ciento de su capital- pudiese lanzar una opa sobre la alemana Premiere. Esta vez se disparó a ritmo de rumores y tribunales. Sogecable fue la compañía más alcista de un Ibex que vivió la última sesión en rojo. Sus títulos se revalorizaron un 4,35 por ciento hasta los 25,65 euros. La responsabilidad de esta escalada es, por un lado de las especulaciones que poco tienen de nuevo, como la posibilidad de que Prisa esté aumentando su bocado en Sogecable -ya controla el 47,086 por ciento- para desembocar en una compra por el cien por cien. Y por otro, de la resolución judicial sobre el enfrentamiento de Sogecable con Mediapro, que cada una de las partes ha entendido de forma diferente. Si el lunes Mediapro aseguraba que el juzgado había desestimado el recurso de Audiovisual Sport (del que Sogecable tiene el 80 por ciento), ayer ésta última lo desmentía. En último caso los responsables de que la cotización de Sogecable esté recuperando lo perdido son los inversores. En la última sesión cambió de manos el doble del papel que se suele negociar de media al día en el trimestre.