Las telecos, que la bolsa había tenido más olvidadas al estar enfrascada en los sustos inmobiliarios y los rumores en torno a las eléctricas, volvieron a saltar ayer a la palestra. El anuncio de un posible intercambio de activos entre Deutsche Telekom y Orange, la filial de telefonía móvil de France Télécom, que puede parecer algo baladí entre dos grupos de semejante tamaño, hizo tocar las castañuelas a las telefónicas. El activo que entregará Telekom se llama Ya.com, su filial española que, en principio, iba a pasar a formar parte del grupo Vodafone España, la filial que está creciendo con más brío en el grupo. Que Vodafone uniese a su fortaleza española en móvil el ADSL de Ya.com habría sido una mala noticia para Jazztel y Telefónica y una pésima noticia para Orange, que no acaba de conseguir integrar Amena y Wanadoo. Como no es Vodafone sino la mucho más débil Orange quien se quedará con Ya.com, el sector se puso a celebrarlo. La primera Deutsche Telekom, por conseguir vender y sumar una compañía de móvil que ansiaba: Orange Nederland. Se disparó y al final de la jornada se anotó un 2,9 por ciento. France Télécom fue el tercer valor más alcista del principal índice galo, el Cac 40, al subir un 2 por ciento. En España, esta noticia impulsó especialmente la cotización de Jazztel, que se llegó a disparar un 7,2 por ciento, aunque los ánimos se serenaron y la operadora terminó con una subida del 4 por ciento, hasta los 0,57 euros. Tampoco le fue mal a Telefónica, que avanzó un 1,56 por ciento, hasta 16,92 euros. Y puestos a celebrar y por aquello del río revuelto se les unió hasta el supuesto perdedor, Vodafone, que subió el 3,67 por ciento. La británica no va a abandonar sus planes de ADSL, comprando compañías o revendiendo el servicio, y ese es otro de los motivos clave de que subiese Jazztel.