PARÍS (Reuters) - Francia impondrá este año nuevos impuestos por valor de 7.200 millones de euros, con tasas sobre los hogares adinerados y grandes corporaciones, para compensar un descenso de ingresos provocado por la desaceleración del crecimiento económico, según el presupuesto revisado de 2012.
El Gobierno socialista planea un impuesto puntual de 2.300 millones de euros sobre los ciudadanos con una riqueza neta de más de 1.300 millones de euros, así como otros 1.100 millones de euros en impuestos extraordinarios a los grandes bancos y las empresas energéticas con acciones de petróleo, según un plan de gasto presentado el miércoles al Parlamento.
El presidente, François Hollande, que está en el cargo desde mediados de mayo, ha dicho que los ricos deben pagar su parte mientras Francia lucha por reducir su déficit público del 5,2 por ciento del PIB el año pasado al 4,5 por ciento este año y el 3 por ciento en 2013, pese a una economía estancada y crecientes niveles de deuda.
Relacionados
- El Gobierno francés recorta drásticamente las expectativas de crecimiento
- Economía/Macro.- El Gobierno francés recorta drásticamente las expectativas de crecimiento y anuncia una reforma fiscal
- El presidente francés quiere la aplicación efectiva del plan de paz de Ginebra sobre Siria
- Gobierno francés revisa en baja previsión de crecimiento, a 0,3% en 2012
- Gobierno francés revisa a la baja previsión de crecimiento, a 0,3% en 2012