El mercado de productos eróticos en España facturó el año pasado casi 500 millones de euros, según un estudio llevado a cabo por Dolce Love, cadena de parafarmacias eróticas. No solo eso, sino que además el sector se encuentra en pleno auge, como demuestra el número de aperturas de establecimientos eróticos, que se dispararon un 120%.
Las previsiones apuntan que dicho incremento se mantendrá en los próximos cursos, en parte gracias a la innovación en el sector, según se desprende del análisis.
España se sitúa como uno de los líderes del sector de venta de artículos relacionados con el sexo, al alcanzar una cuota del 20% del mercado global, superando a Italia y Reino Unido, que rozan el 15%.
El sector crece por gracias a los cambios de hábito en el consumidor, y a la apertura de mentalidad respecto a estos productos, desapareciendo tabúes que existían en el pasado. "Pero, sin duda, el factor clave es el crecimiento exponencial de la profesionalización en el ámbito de la salud sexual", indican desde la cadena. "El producto es fundamental, pero además los clientes reclaman asesoramiento profesional", asegura Ángeles Gutiérrez, directora de Dolce Love.
Otra causa de las que se hace eco Dolce Love en su análisis del sector en España, más relacionada directamente con el mercado, tiene que ver también el auge de reuniones como las de 'tupper sex', más frecuentes entre mujeres que en hombres pero con ligeros incrementos en la participación de estos últimos. El 80% de los hombres y mujeres que acuden a eventos de este tipo acaban realizando compras que rondan una media de 70 euros.
Consumo en mujeres
Actualmente cerca del 80% de las compras que se realizan en tiendas físicas las llevan a cabo las mujeres. Casi seis de cada diez féminas de entre 20 y 45 años reconocen haber comprado y utilizado productos eróticos para sus relaciones sexuales. Los productos más vendidos del mercado son los vibradores, las bolas chinas y los aceites corporales estimulantes.
No existe una distinción clara a la hora de establecer criterios de compra. El estereotipo de la compradora lo tendríamos en una mujer con un nivel socio-cultural medio, de clase media y media-alta con nivel adquisitivo medio-alto. Ellas se suelen gastar un 15% más de media en cada una de sus compras y casi siempre suelen llevar dos o más productos. En total, gastan en torno a 60 euros por visita.
Consumo en hombres
Apenas dos de cada diez reconocen haber utilizado y comprado productos eróticos en sus relaciones sexuales. Suelen comprar accesorios y juguetes como vendas, vibradores y geles de efectos diferentes aglutinando el 60% de sus compras. El 5% de sus compras la destinan a DVD eróticos.
Ellos son más recatados en el gasto y a la hora de comprar suelen hacerlo de uno en un producto con un ticket el 15% más bajo que las mujeres. Aproximadamente 40 euros por visita.