
Antes de desgranar en qué consiste la red que preside, Silvia Carpitella recuerda que en Citi -el banco del que también es directora financiera en España y Portugal- hay cinco mujeres en un comité de dirección compuesto por 12 personas. "Esto demuestra que estamos convencidos del aporte positivo que supone", cuenta.
Citi Women no es más que una de las patas de la política de Recursos Humanos de la entidad, en la que la palabra diversidad preside buena parte del discurso y las acciones. "El objetivo de Citi Women es asegurarse de que tenemos un fórum para compartir experiencias personales y profesionales y así nos da tiempo a conocernos. Pero también nos sirve para contar las dificultades que conlleva el ascenso profesional", explica Carpitella, que, por si acaso su respuesta genera excepticismo, advierte: "Estamos convencidos de que todos los empleados pueden aportar mucho a la rentabilidad del negocio".
Detectar mujeres y talento. Carpitella explica que la maquinaria de esta red se desarrolla en torno a tres áreas: desarrollo profesional, eventos y networking, y comunicación y marketing. Reuniones mensuales en las que cada uno presenta sus ideas. Ideas que pueden ir encaminadas a acabar con esa máxima que también reconoce: "Cuando se sube en la pirámide el porcentaje de mujeres baja".
Carrera profesional
Directivas como Mayte Arango y Rosa García. Diputadas como Carmen Quintanilla. Son solamente algunos de los nombres que han pasado por la sede de Citi para contar algunos de los entresijos de su carrera profesional.
Porque, cuando salen a relucir las diferencias entre el comportamiento masculino y femenino, y aun a riesgo que caer en los consabidos tópicos, Carpitella los tiene claros: "Estas diferencias a veces suponen un freno para las mujeres, porque nos falta lanzarnos ante una oportunidad", relata. Se nota, dice, hasta en algo tan habitual como las reuniones de trabajo: "Los hombres hablan y ellas esperan a que llegue su turno". Un rasgo que puede interpretarse como mera cortesía pero que ella revela como síntoma de inseguridad.
"Insistimos mucho en la importancia del networking. Ellos le dedican mucho más tiempo y eso contribuye en cierta manera al desarrollo de la carrera", señala. Talleres, reuniones y eventos abiertos a todos los empleados, aunque Carpitella explica que al final la presencia femenina es abrumadora. "Llevamos haciendo esto desde 1999 y siguen acudiendo más mujeres. Puede parecer un ejercicio de retroalimentación pero es cierto que traemos a gente importante y muchos son hombres. Somos una red seria", matiza.