Más o menos un día ha estado la firma Armani en venta. El diseñador italiano y jefe de la empresa confesó ayer a un periodista del diario Handelsblatt alemán que estaba considerando la opción de vender su negocio de moda. Esta mañana él mismo lo ha desmentido.
"Lo de ayer fue una ocurrencia, evidentemente equivocada", ha declarado hoy Giorgio Armani, después de asegurar que la empresa textil "no está en venta".
Varias publicaciones italianas como La Republicca, Ansa o Tgcom recogen las palabras del modisto, que con una escueta nota de prensa ha puesto fin la firma a su andadura por el mercado.
La aventura comenzó esta mañana, cuando el diario alemán Handelsblatt anunció que Armani tenía pensado poner en venta su negocio, valorado en 5.000 millones de euros, "al mejor postor". El diario mencionaba a una entrevista concedida por el diseñador italiano a uno de sus reporteros en Milán, y añadía que Armani veía a L'Oréal como "un aliado, aunque si hay alguna oferta mejor, el comprador sería el que "convenza a los directivos".
La semana pasada, durante la presentación de resultados anuales, el consejero delegado de L'Oréal, Jean Paul Agon, adelantó que su compañía aspira a convertir la marca Giorgio Armani en una línea global.
L'Oréal y Armani ya cuentan con un acuerdo para la comercialización de la marca italiana como perfume y producto de belleza, aunque el grupo francés ha negado hasta el momento su interés por negocios distintos al de la cosmética.
