valladolid. Caja Madrid, de la mano de la sociedad de garantía recíproca de Castilla y León- Iberaval-, pondrá a disposición de pymes y autónomos una línea de crédito de 40 millones de euros tanto para circulante como para inversiones, según un acuerdo firmado por el presidente de la SGR, José Rolando Álvarez, y el subdirector general y director de Banca de Particulares de la entidad, Fernando Sobrini. El acuerdo, cuya firma contó con la presencia del consejero de Economía de la Junta, Tomás Villanueva, supone un clara apuesta de Caja Madrid por esta sociedad de garantía recíproca, la primera de España en número de socios, con más de 16.000 empresas adheridas. La entidad que preside Rodrigo Rato se convertirá en la que mayor volumen de financiación pone a disposición del tejido empresarial de las 22 con las que la SGR tiene firmado acuerdos. Además, entra en su órgano de administración al aportar 1,2 millones a su capital social. Las pymes y autónomos de Castilla y León y La Rioja, región en la que también actúa Iberaval, podrán solicitar financiación por importe de hasta 600.000 euros y plazos de amortización de hasta 15 años en condiciones ventajosas. Con el apoyo de la Junta de Castilla y León, Iberaval ha realizado durante los últimos años más de 5.200 operaciones y sus avales permiten mantener más de 90.000 empleos. Gestionar los créditos ICO El presidente de Iberaval aprovechó el acto para reivindicar el papel de las sociedades de garantía recíproca para canalizar los créditos ICO y ponerlos en el mercado en "tiempo récord". Por su parte, Sobrini defendió el "binomio dinamizador" para las pymes que, en su opinión, constituyen las SGR y las entidades financieras. Iberaval incrementó en 2009 su riesgo vivo -importe avalado por la sociedad pendiente de vencimiento- en un 1 por ciento, hasta alcanzar los 629 millones de euros. Durante ese año, formalizó 9.178 operaciones de aval por un importe global de 286 millones de euros. De ellos, 40 millones se destinaron a financiar capital de circulante de las empresas, cifra que ha aumentado exponencialmente en relación con ejercicios anteriores. Otros 90 millones se emplearon en proyectos de inversión en el negocio y casi 157 a satisfacer las garantías que exigen las administraciones para acceder a los concursos públicos y su ejecución. Un total de 1.409 empresas (353 más que en 2008) presentaron solicitudes de aval el pasado año. De ellas, se aprobó el 84,5 por ciento de las nuevas operaciones estudiadas y el ejercicio se cerró con el 90,3 por ciento formalizadas. En ese ejercicio, los recursos propios de Iberaval registraron un incremento del 16,6 por ciento, al pasar de los 60 millones en 2008 a los 70 millones al cierre de 2009. El coeficiente de solvencia, que indica en qué proporción pueden responder los recursos a los compromisos de deudas a corto plazo, se sitúa por encima del 11 por ciento, superior al mínimo exigido. El 62 por ciento de las empresas que han solicitado las garantías de Iberaval para acceder a financiación dispone de una plantilla inferior a cinco trabajadores.