Sólo un siete por ciento de los hombres elige esta opción dentro de los países desarrolladosMADRID. La posibilidad de dedicar más tiempo a la familia y al ocio y, en definitiva, de conseguir una mayor conciliación entre la vida laboral y profesional está haciendo que el trabajo a tiempo parcial se convierta en una alternativa cada vez más habitual para las mujeres de los países desarrollados.Según los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de la que España es miembro, un 22 por ciento de las mujeres españolas trabaja actualmente a tiempo parcial.Nuestro país se sitúa así por debajo de la media de la OCDE, que se establece en un 25, 5 por ciento. Aunque si nos referimos en concreto a los países de la ya antigua Europa de los 15, la media asciende hasta un 32, 3 por ciento. Sin embargo, y por una vez en la vida -y seguramente sin que sirva de precedente- nuestro país aventaja a naciones tan desarrolladas como Suecia, que apenas supera el 20 por ciento, y Estados Unidos, donde solamente un 18,3 por ciento trabajan a tiempo parcial.Los porcentajes más altos coinciden con sociedades desarrolladas del entorno europeo, como Holanda y Suiza. Según los datos de la OCDE, en Holanda ya son un 60,9 por ciento las mujeres que optan por reducir su jornada laboral, mientras que en el país de los cantones la cifra alcanza el 45,8 por ciento. A estos dos países les siguen Japón, con 42,8 por ciento, y Australia, donde el porcentaje de trabajadoras con horario reducido es de 41,7.Pero a pesar de las diferencias entre unos países y otros, hay algo que sí está claro: la gran desigualdad con los hombres. Los datos de la OCDE afirman que, dentro de los países miembros, tan sólo un siete por ciento de los trabajadores varones opta por el empleo a tiempo parcial.A la cola del ranking femenino se sitúan las últimas incorporaciones a la Unión Europea; Hungría, con un 5 por ciento, y República Eslovaca, con un 4,1 por ciento.