
Júlia Farré, nutricionista: "Nunca compres una sandía si tiene el rabito verde y tieso"
Júlia Farré es una joven nutricionista que utiliza sus redes sociales como Instagram, con más de 40.000 seguidores, para compartir consejos y recomendaciones para tener una vida saludable gracias a la alimentación. La experta publica vídeos en los que muestra trucos para elegir los alimentos, combinaciones de platos que nunca debes hacer, frutas que mejoran la memoria y mucho más.
Recientemente, publicó un vídeo en el que explicaba a sus seguidores la mejor forma de elegir una buena sandía en el supermercado. Para ello, la experta se basa en cinco sencillos consejos que, al ponerlos en práctica, harán que siempre sepas cuál es la mejor sandía de todas las ofertadas. Si sigues sus recomendaciones, jamás volverás a decepcionarte al abrir la fruta en casa.

- Sandía | Canva
1. Una mancha amarilla
La experta recomienda encarecidamente observar con detenimiento el color de la sandía antes de comprarla. Aunque pueda parecer algo irrelevante, las manchas de esta fruta pueden decirnos muchas cosas sobre su interior. "Debe tener una mancha amarilla y no blanca, esto quiere decir que ha reposado en el suelo mientras maduraba, por lo que será una sandía mucho más dulce".

- Sandía | Canva
2. El sonido
Según Farré, otra forma de saber si una sandía es buena, es comprobar el sonido que hace. Sí, el sonido que hace. Si al golpear su superficie emite un sonido hueco, esa es la que debes elegir. Esto se debe a que la fruta contiene mucha agua, y por lo tanto será muy jugosa y mucho más refrescante que el resto.

- Sandía | Canva
3. Rabito seco y rizado
Para que una sandía sea perfecta, según la nutricionista, hay que fijarse en otro elemento de su exterior. Se trata del rabito, la parte que une la sandía a la planta y que tiene un gran significado respecto a su sabor. "Tiene que estar seco y rizado. Si lo ves verde y tieso, no es una buena sandía". Esto se debe a que si se trata de un rabito seco, quiere decir que se cortó en el momento adecuado de maduración.

- Sandía | Canva
4. El peso importa
Quizás esta sea la recomendación más conocida, pero también es fundamental a la hora de elegir una buena sandía ya que indica que tiene más agua. La nutricionista asegura que la fruta que escojamos debe tener un peso que nos sorprenda, "que cuando la veas y la cojas, digas: ostras, pesa más de lo que parecía".

- Sandía | Canva
5. Simetría
Por último, Farré, recomienda escoger una sandía cuya forma sea simétrica y "lo más redonda posible, sin protuberancias extrañas". De esta manera sabremos que ha tenido un crecimiento regular sin alteraciones que afecten negativamente a la textura y al sabor de la sandía.