
El Barça se prepara para el mercado de fichajes del próximo verano sabiendo que deberá abonar una elevada cantidad para cerrar la incorporación de un central. De hecho, según los cálculos blaugrana, el club que dirige Josep María Bartomeu deberá invertir, al menos, dos tercios del dinero que ya tiene aprovisionado para incorporaciones en la llegada de un zaguero 'top'. Esto es, al menos 50 millones de euros, cantidad que habitualmente se abona para futbolistas de otro corte más ofensivo, como delanteros o mediocampistas.
Pero, desvela el diario Marca, esta vez el club del Camp Nou sabe que esos guarismos deberán gastarse en un hombre que apuntale su retaguardia ante la más que probable salida de Bartra y la también posible venta de Mathieu y/o Vermaelen.
El primero de la lista es Laporte, central vasco-francés del Athletic Club. Su cláusula cuesta los 50 millones antes mencionados Teniendo en cuenta que el siguiente del elenco es Giménez (Atlético) y que su coste es similar, en el Camp Nou ya asumen que, o se realiza esa inversión, o será imposible incorporar un futbolista del gusto de Luis Enrique para esta posición.
Es cierto que en el mercado extranjero se podrían encontrar zagueros más económicos y de calidad similar, pero en ocasiones la inversión debería ser mayor porque el salario de estos futbolistas supera al de aquellos que se pueden encontrar en nuestras fronteras.
Así, por ejemplo, Marquinhos, del PSG, cobra casi cinco millones netos por campaña, casi cinco veces más de lo que percibe actualmente Laporte en San Mamés. Es, por lo tanto, lógico que el Barça trate de sacar a su futuro fichaje del mercado nacional, más que del europeo.
En todo caso, y para tranquilidad de los aficionados culés, cabe aclarar que con el fichaje de este refuerzo el club no se quedará casi sin dinero para fichajes. Hay que tener en cuenta que se estima que habrá notables ingresos por salidas como las ya citadas de Bartra, Vermaelen o Mathieu.