El futuro profesional de Gareth Bale se tambaleó en los últimos días del mercado de fichajes. A pesar de que el futbolista tenía decidido aceptar la oferta del Real Madrid, dos notables propuestas económicas hicieron dudar hasta el último momento.
Los 91 millones de euros ofrecidos por el club blanco se vieron superados por dos entidades con gran potencial financiero que trataron de hacerse con los servicios del galés.
Según informa el diario 'Marca', una de ellas fue el París Saint Germain, que puso cien millones de euros encima de la mesa para intentar el fichaje. En caso de haber aceptado, Bale habría sido oficialmente el traspaso más caro de la historia del fútbol, algo que al recalar en las filas blancas está en discusión, por las dudas acerca de la cantidad definitiva pagada.
La propuesta del club parisino fue declinada por Bale al considerar que habría sido un paso atrás llegar a la Liga francesa, considerando que en el Real Madrid podrá luchar por todos los títulos y quizá en el PSG habría sido más difícil pelear por la Champions.
No obstante, en los últimos días sí llegó otra propuesta que habría resultado más atractiva para todas las partes. Se trata de una oferta del Manchester United, que según 'L'Equipe' llegó a ofrecer 150 millones de euros para contratar a Bale, en lo que además habría sido una posibilidad apreciable en cuanto a las aspiraciones deportivas.
La palabra dada por el galés al Real Madrid acabó pesando más. Su afición por el club de la capital española fue decisiva y Bale ya viste de blanco. No obstante, los intentos por desbaratar la operación fueron más serios de lo previsto. Y a punto estuvieron de terminar con lo que habría sido un duro varapalo para la planificación deportiva y comercial del actual subcampeón de la Liga española.
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