
Cuando un inversor quiere contratar un fondo, su punto de partida suele ser plantease dejar sus ahorros en un producto de renta variable o decantarse por otro de renta fija. Pero, aunque no está todo inventado en esta industria, existen soluciones intermedias que permiten sacar partido a los dos mercados.
Éste es el caso de los fondos de bonos convertibles, una solución inversora a medio camino entre las acciones y los bonos. Y una buena opción con los actuales altibajos bursátiles, ya que en momentos de alza bursátil suben menos que el mercado, pero cuando arrecian tormentas, retroceden menos que la renta variable.
¿Qué son los bonos convertibles? Son productos que se caracterizan por invertir en títulos emitidos por empresas que dan un tipo de interés fijo y, además, ofrecen la posibilidad de cambiar los bonos por acciones a un precio prefijado.
Menor caída que el mercado
El mejor ejemplo que refleja su comportamiento es el que se produjo el pasado 27 de febrero, cuando los mercados dieron el mayor susto a los inversores de los últimos tres años. Ese día, el EuroStoxx 50 sufrió una corrección del 2,62 por ciento, mientras que el índice de bonos convertibles -el UBS Europe Focus Convertible- cayó el 1,70 por ciento. Una caída más suave que ha permitido que los fondos de convertibles se adelanten a los de renta variable europea.
De hecho, West LB Mellon Asset Management asegura que en su gama de fondos Compass, los European Convertibles ganan desde principios de año el 2,38 por ciento, frente al 1,91 por ciento de su WMAM European Select Equity. Una ventaja que se debe exclusivamente a la corrección de los mercados ya que hasta el 26 de febrero, el fondo europeo superaba al de convertibles: un repunte del 5,66 por ciento respecto al 4,18 por ciento del convertible.
Pero este tipo de fondos no sólo es una buena opción si el mercado está de capa caída, "hasta la corrección del pasado martes, lo convertibles europeos mostraban un rendimiento de al menos el 75 por ciento de la renta variable", indica la gestora West LB Mellon AM.
Sólo una gestora española
Pero no sólo dependen de la renta variable. Los convertibles también se ven afectados por los tipos de interés. Y es que no hay que olvidar que se trata de un bono que en algún momento de su vida puede convertirse en acciones de la empresa emisora en condiciones prefijadas y conocidas desde el momento de su emisión.
Según los datos de Standard & Poor's, en España se comercializan doce fondos de bonos convertibles europeos, de los que sólo uno es de una gestora española. Se trata de Banif y su Banif Renta Fija Convertibles, que gana el 7,72 por ciento en doce meses y el 22,25 por ciento en tres años. Unos buenos resultados que el inversor puede lograr asumiendo menos riesgo que con la renta variable.