
Sólo se pretende sancionar la conductas violentas o coactivas. La ley, por primera vez, protege el derecho de manifestación y castiga la perturbaciób de la misma. Respecto a las manifestaciones en el Congreso, ya la ley de 1992 fija como muy graves esas concentraciones delante de tales instituciones. En esta ley pasa a ser infracción leve y sólo será grave si se produce una perturbación de dicha manifestación.