España

Los controladores confían en llegar "hoy mismo" a un acuerdo de mínimos

    José Blanco. <i>Imagen: Archivo</i>


    El presidente de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), Camilo Cela, ha expresado hoy miércoles su deseo de llegar "hoy mismo" a un acuerdo en la negociación por un nuevo convenio colectivo que están negociando con Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA). José Blanco ha hablado por su parte de que será en "los próximos días".

    Camilo Cela ha señalado que las conversaciones con AENA se reanudan esta tarde y que van a la mesa con "mentalidad abierta" y confiando en alcanzar un "acuerdo de mínimos", aunque ha acusado al ente público de "no haber querido negociar un convenio".

    Para el presidente de USCA, sindicato que ayer anunció que no va a ejercer el derecho legal de huelga durante el mes de agosto, las palabras del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dadas en Mallorca sobre la necesidad de llegar a un acuerdo "han sido muy constructivas".

    Dos cuestiones fundamentales

    Sobre la mesa de negociación hay dos cuestiones fundamentales que tratar, tras la presentación de una plataforma de doce puntos por parte de los controladores y prácticamente estar de acuerdo en diez de ellos. Se trata de la remuneración salarial y de la jornada laboral.

    El secretario de Comunicación de USCA, César Cabo, destacó que no se está hablando del salario, "dado que ya nos han rebajado el 50 % del sueldo", sino que lo importante "es ajustar la jornada laboral y que no tengamos que estar trabajando 29 días de 30 todos los meses".

    Para Cabo, si AENA habla de ir convergiendo hacia Europa en la jornada laboral, "debe empezar a hacerlo ya" y que lo presente como un plan de futuro, porque se les pregunta cuál es su programación para 2011 y "dicen que no lo saben". Por ello consideran que es "difícil" llegar a un acuerdo con una empresa que no sabe lo que necesita, y cuál es su plan de trabajo para los próximos años.

    Cela ha hecho hincapié en la situación laboral, porque quieren saber cuáles son los turnos, "cuándo vamos a tener vacaciones o dejar de tener una disponibilidad absoluta para la empresa todos los días", de forma que se pueda "regularizar la caótica vida que llevamos ahora y normalizar un servicio enrarecido".

    A nivel laboral los controladores solicitan ir rebajando las horas de trabajo anuales de 1.670 a la media europea que se encuentra en torno a las 1.350 horas y, según USCA, lo que no se puede hacer es "darles una especie de barra libre" con el tema de las horas.

    Blanco, menos optimista

    Por su parte, el ministro de Fomento, José Blanco, ha calificado de "positiva" y "buena" la decisión de los controladores de renunciar a la huelga en agosto, aunque lamentó que no se trate de una renuncia definitiva para que en el marco del proceso de negociación no "haya pendiente una amenaza", si bien confió en que el acuerdo pueda sustanciarse en los "próximos días"."Nuestra posición no ha variado", ha indicado Blanco en una entrevista, y ha recordado que hasta la ruptura de las negociaciones se estuvo a punto de alcanzar un principio de acuerdo en la mayoría de los temas planteados por USCA, en lo que vio "un punto de inicio para seguir avanzando". "Valoramos este avance y esperamos que se pueda sustanciar en los próximos días", ha confiado.

    Preguntado por si teme que se produzcan huelgas de celo o una nueva convocatoria en septiembre, Blanco dijo creer en la "buena voluntad" expresada por los controladores. "No tengo ninguna animadversión contra ellos, contrariamente a lo que pueda parecer; han manifestado su compromiso de negociar, de dialogar y de avanzar, y yo me quiero quedar con eso", apuntó Blanco, para añadir que, si esa voluntad se traslada en "hechos ciertos", será el primero en reconocerlo. "No valen sólo las buenas palabras sino los hechos concretos", ha avisado.

    "Una negociación abierta"

    En cualquier caso, si se produjera la misma situación después de agosto, Blanco ha afirmado que en todo momento el Gobierno preservará el "interés general". "Seguiremos tomando las medidas necesarias. Mi primera responsabilidad es defender el interés general y la seguridad, me gustaría tomar soluciones fruto del consenso y del acuerdo, pero si no lo hay, mi obligación es seguir tomando decisiones", ha zanjado.

    Blanco ha asegurado que AENA tendrá "permanentemente abierta" la mesa de negociación, ya que la voluntad del Ministerio de Fomento es la de "acordar y dialogar". "Lo vengo diciendo desde el primer día, pero siempre dentro de las reglas del juego y de la ley", apuntó.

    En esta línea, ha recordado a los controladores que las "cosas han cambiado" y que "existe una nueva ley". "Espero que se entienda definitivamente que ese marco no se puede cambiar si se trata de tener un sector más competitivo y más productivo en el que todos debemos estar interesados, también los propios controladores", ha señalado.

    Preguntado por qué no ha accedido a reunirse personalmente con USCA, indicó que el ministro de Fomento está en las mesas de negociación a través de AENA. "Es ahí donde se tienen que sustanciar los acuerdos, ahí y sólo ahí, y yo no diría ni expresaría cosas diferentes a la que ya están expresando los representantes de AENA en la mesa de negociación", manifestó.