El banco estadounidense registró en el tercer trimestre del año un beneficio neto de 3.800 millones de dólares, o 1,23 dólares por acción, frente a los 2.200 millones de dólares que ganó en el mismo periodo del año anterior.
Los ingresos se elevaron a 20.830 millones de dólares, desde los 20.740 millones de dólares del tercer trimestre de 2010.
Los resultados han superado con creces las expectativas de los analistas. De media, los expertos consultados por FactSet habían previsto un beneficio por acción de 82 centavos y unos ingresos de 19.270 millones de dólares.