Primero perdieron el control de Dhul. Luego el de Carcesa. Pero lo peor puede estar por llegar y la familia Ruiz-Mateos podría quedar apartada de forma definitiva de todas las compañías de Nueva Rumasa.
"En los dos primeros concursos de acreedores que se han admitido se les ha retirado ya la gestión. Lo normal es que los jueces les aparten también del resto de compañías conforme vayan entrando en suspensión de pagos", aseguran fuentes próximas al proceso. Es algo que incluso el Gobierno da por hecho. Hasta el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha manifestado ya que las empresas de Rumasa "son viables con otra gestión".
Aunque por ahora no se ha declarado ningún concurso culpable, esa decisión se toma con el proceso judicial mucho más avanzado, los jueces sí que han detectado indicios de que al menos cierta responsabilidad en la caída del grupo tenían. "Y lo normal es que todas las compañías sigan el mismo camino porque hay avales, préstamos y participaciones cruzadas, con lo que no tendría sentido dejarles seguir en una empresa y apartarles de otra", aseguran las fuentes consultadas. Sobre todo teniendo en cuenta que todas las sociedades dependen de una misma dirección, la familia Ruiz-Mateos.
Esa fue una de las razones que el magistrado Blas Alberto González del juzgado de instrucción número 1 de Granada, esgrimió para retirar a la familia de la gestión de Dhul. Pero no fue la única. En la decisión del juez también influyó que la compañía ya hubiese sido demandada en multitud de procedimientos civiles por ser "fiadora" de deudas ajenas. González considera que este es el motivo por el que la compañía de postres se encuentra en insolvencia y responsabiliza a sus gestores que lo han permitido.
El problema es que esta forma de actuar es común a todas las sociedades del holding. De hecho, el magistrado que aceptó el concurso de Carcesa fue más allá y consideró importante desvincular a la familia de la gestión para dar seguridad y confianza a trabajadores y acreedores y para evitar que continúe relacionada con las otras empresas del grupo que se encuentran "en estos momentos en situación de insolvencia actual o inminente".
No es ningún secreto que los motivos que han empujado a los jueces a tomar estas decisiones los reúnen también otras de sus sociedades.