Madrid, 11 jun (EFECOM).- El Tribunal Supremo ha eximido a la compañía Pelayo del pago de una indemnización de 337.925 euros porque, según la sentencia conocida hoy, el asegurado utilizó su vehículo "como instrumento para intentar matar o lesionar" a un taxista en Madrid.
La sentencia del Tribunal Supremo revoca otro dictamen judicial de la Audiencia Provincial de Madrid por el que se declaraba "responsable directa" a la aseguradora de los daños y heridas provocados al taxista Servando Hernández Hernández por José Hernández Romero, el pasado 25 de octubre de 2004.
Hernández Romero, de 33 años, fue condenado a ocho años de prisión por intento de homicidio, ya que, tras una discusión con el taxista en el madrileño Paseo de la Ermita del Santo, esperó a la víctima en una gasolinera cercana y aguardó el momento para estrellar marcha atrás su furgoneta Renault Express contra el vehículo Skoda del taxista, a quien provocó heridas de las que tardó casi un año en recuperarse.
Según el parte de daños, el taxista sufrió por el impacto de la furgoneta del condenado un "traumatismo craneoencefálico grave", pérdida de dientes y "traumatismo torácico con fractura de costillas", que le imposibilitaron posteriormente, tras 77 días en el hospital y 332 días de baja, la realización de cualquier trabajo posterior.
El conductor condenado, que era reincidente en sus intentos de homicidio, disfrutaba de la cobertura de responsabilidad civil de Pelayo, aunque la aseguradora recurrió la sentencia de la Audiencia Provincial ante el Supremo pues consideraba que este siniestro no formaba parte del "hecho de la circulación" por el que estaba asegurado José Hernández Romero.
Pelayo consideró que el acusado, en el momento del suceso, "desnaturaliza la utilización ordinaria para la que el vehículo fue creado", ya que actuó así "al dirigir su vehículo a gran velocidad y marcha atrás, durante un recorrido de 34 metros de distancia", y con "la intención de matar y lesionar".
Ahora, la sentencia indica que la aseguradora "no ha de responder con quien tenga concertado el seguro obligatorio de responsabilidad civil, cuando el vehículo de motor sea instrumento directamente buscado para causar el daño personal o material derivado del delito". EFECOM
dsp/prb
Relacionados
- Economía/Motor.- La filial española de Ford espera que otorgue la producción de "al menos un nuevo coche" a Almussafes
- Volkswagen, el coche favorito de alemanes sobre todo entre menores de 50 años
- Economía/Motor.- El Saab 9-3 descapotable logra la máxima puntuación en los test de coche del estadounidense IIHS
- Cada vez más españoles pagan 200.000 euros por un coche
- Economía/Motor.- El Chevrolet Sequel, primer coche de hidrógeno en recorrer 480 kilómetros sin repostar