Madrid, 15 mar (EFECOM).- El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, está convencido de que tendrá "la capacidad de persuasión suficiente" como para convencer al Ministerio de Fomento y a la Comunidad de Madrid de que se construya para el AVE una nueva estación en Abroñigal además de ampliar la de Atocha.
Según dijo en la rueda de prensa en la que informó de los acuerdos adoptados hoy por su Gobierno, en esa "persuasión" utilizará "datos, cifras y evaluación de costes", además de los ejemplos de otras ciudades que han adoptado la solución que él propone, como París y Barcelona, pero no recurrirá al "veto a propuestas de recalificación" de terrenos de Renfe como elemento de "presión".
Sí advirtió, no obstante, de que el Ayuntamiento de Madrid no podría autorizar ningún tipo de uso, ni terciario ni residencial, en el entorno de una Atocha ampliada que aumentara todavía más el "colapso" de esa zona Madrid, que ya sería de por sí, dijo, "prácticamente insoportable" para la ciudad.
Resumió su planteamiento en la frase "Atocha sí, pero Atocha sólo no", aunque reconoció que no puede "obligar" al Ministerio a construir una nueva estación y que "si Fomento no quiere hacer Abroñigal, nos quedaremos sólo con Atocha".
Según Ruiz-Gallardón, construir una estación para el AVE en Abroñigal, en los terrenos que ahora ocupa una terminal de contenedores de Renfe a 1,5 kilómetros al sur de Atocha, ofrecería una conexión "mucho más cómoda" con otros destinos, incluido el aeropuerto de Barajas, para "muchos" de los 34 millones de viajeros anuales que de la otra forma "colapsarían" el centro de Madrid.
Ruiz-Gallardón pide a Fomento, como impulsor del proyecto de ampliar Atocha como estación central de todas las líneas de AVE, que no "obligue" a llegar hasta allí a los 34 millones de viajeros anuales -frente a los 8 actuales- que el propio Ministerio calcula que confluirán en Madrid.
Según estimaciones del Ayuntamiento, "una parte muy importante" de esos usuarios de las distintas líneas de alta velocidad, quizá la mitad según dijo hoy el alcalde, podría preferir quedarse en Abroñigal, junto a la M-30.
Serían los viajeros que quisieran ir al aeropuerto, enlazar con otras líneas de AVE o llegar a municipios del área metropolitana, mientras el resto podrían continuar viaje hasta Atocha e incluso hacia Chamartín a través de un tercer túnel ferroviario norte-sur que se construirá bajo la calle de Serrano.
A su juicio, "sería completamente absurdo" y "no parece razonable" forzar a 34 millones de viajeros a entrar al centro de la ciudad".
Su solución, dijo además, "es la que han hecho las grandes ciudades del mundo", entre las que mencionó París, que dispone de tres estaciones de AVE previas a la terminal central.
"Es también lo que ha hecho, de una forma muy inteligente, Barcelona, que además de la estación de El Prat se han habilitado las de Sants y La Sagrera y todavía existe una fuerte presión de la sociedad catalana para que además haya una nueva estación en el paseo de Gracia", argumentó. EFECOM
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