Empresas y finanzas
Unioliva exige a sus socios devolver los intereses de cinco años para sobrevivir
Javier Romera
Unioliva, la segunda cooperativa de aceite de España, integrada actualmente en Dcoop, se encuentra al borde de la quiebra tras atrapar a cerca de 2.500 socios e inversores que le habían confiado sus ahorros.
En una carta remitida a todos ellos el pasado viernes, el consejo rector de la sociedad admite que "la cooperativa presenta una situación financiera que imposibilita restituir a los impositores de plazo fijo y titulares de cuenta corriente de su sección de crédito, disponer de forma inmediata de sus fondos", tal y como adelantó elEconomista el pasado día 20.
Según Unioliva, el agujero financiero es de 41,6 millones de euros -26,9 millones por las imposiciones a plazo fijo y otros 14,6 millones por las cuentas corrientes-, aunque de acuerdo con distintos socios consultados por este periódico, la cantidad real podría ser incluso bastante mayor.
Medidas de urgencia
Tras la destitución el pasado mes de agosto de su presidente, José Consuegra, y para garantizar la supervivencia de la empresa, el consejo rector ha propuesto a los cooperativistas e inversores que devuelvan todos los intereses abonados durante los últimos cinco años. "Se impondrá a los socios un esfuerzo económico que persigue el propósito de situar a la cooperativa en óptimas condiciones de producción, incorporando controles de gestión y transparencia que garanticen su continuidad", se asegura en la carta.
"Los intereses devengados por la cooperativa en los últimos cinco años a los socios de la sección de crédito deberán ser restituidos", se añade. Su importe, siempre según los datos del consejo rector, ascendería a 5,04 millones. El problema de fondo es que Consuegra pagó intereses del 4,75% por depósitos a plazo fijo -"en condiciones netamente superiores a los del mercado", se explica ahora en la carta- al tiempo que ofrecía créditos muy baratos.
De forma paralela, la cooperativa ha presentado un plan para devolver el dinero de los depósitos, previa deducción de los intereses devengados, pero es un plan que aún no ha sido aprobado. En el mismo se establece un calendario de pagos progresivo que comenzaría el próximo 30 de noviembre y concluiría el 31 de diciembre de 2022.
Calendario de pagos
El consejo rector de Unioliva, que ha declinado dar ningún tipo de explicación pública, explica en la carta a los socios que "el calendario de pago que se establece obedece a criterios de prudencia y ha tenido en consideración únicamente financiación bancaria mediante garantía hipotecaria". No obstante, la cooperativa señala que está negociando financiación adicional que permita el anticipo de los pagos establecidos.
Unioliva está analizando las causan que han llevado a esta situación agónica para "determinar sus últimas consecuencias". De momento se ha apuntado ya a los cooperativistas varias razones. Entre ellas destaca la ?existencia de importantes inversiones llevadas a cabo en la almazara financiada con cargo a los fondos de la sección de crédito sin llevar a cabo las necesarias amortizaciones y restituciones de capital, por importe de 8,8 millones.
Fraude
Pero es que, además, se han detectado otros posibles fraudes, como la entrega de anticipos de cosecha a socios en cuantías netamente superiores al importe del volumen de aceituna a liquidar, por 4,7 millones o "liquidaciones de aceituna mediante una técnica contable que ha propiciado su sobreponderación", es decir, el pago de un precio superior, por otros 3,58 millones y eso, al margen también de la existencia de saldos fallidos por un volumen de otros 10 millones más.
La gravedad de la situación es tal que la empresa no puede hacer frente ahora mismo ni a la devolución del dinero en depósitos y cuentas corrientes ni a los pagos de la última campaña.
De hecho, la propuesta del consejo rector establece que "el pago de la liquidación de la actual campaña 2015/2016 se llevará a cabo una vez que conste en la cooperativa que el socio ha suscrito instrumento notarial redactado al efecto asumiendo su obligación de entregar durante un mínimo de cinco años la íntegra producción de su cosecha de aceituna, de conformidad en cuanto a su volumen con los términos y condiciones que establecen los estatutos sociales y la normativa de cooperativas andaluzas".
La mayoría de los socios, que han rechazado de momento esta propuesta y se niegan a seguir entregando la aceituna ante las dudas de poder cobrar, están estudiando ya unirse y emprender acciones legales. Su idea pasa por demandar no sólo al consejo rector sino también al expresidente, al que acusan incluso de haberse llevado el dinero.
En una entrevista con elEconomista el pasado viernes, Consuegra rechazaba estas acusaciones -"yo no me he llevado el dinero, no tengo ni para comer y vivo a consta de lo que me dan mis hijos", decía-, pero distintos socios aseguran que tiene un gran patrimonio. "A quien todo el mundo nos está mintiendo. No podemos fiarnos ya de nadie. Nos exigen que devolvamos los intereses de los últimos cinco años y no hay ninguna garantía de que nos van a devolver nuestros ahorros", asegura uno de los socios, que prefiere mantener el anonimato por ahora.