Empresas y finanzas
Beneficio neto de Lafarge creció un 39 por ciento en 2007
Para este año, el grupo espera un "nuevo crecimiento de la demanda mundial" en el sector de la construcción, pese a "la debilidad de la demanda en Estados Unidos y la ralentización en España", señaló la empresa en un comunicado.
El volumen de negocios de Lafarge creció un 4% el año pasado hasta los 17.614 millones de euros, mientras que su resultado de explotación corriente subió un 17%, hasta los 3.242 millones, añadió.
En el cuarto trimestre de 2007, su facturación fue de 4.335 millones, un aumento del 3% (un 6% en crecimiento orgánico), y el beneficio neto subió un 36%, hasta los 375 millones.
"En 2007, Lafarge ha demostrado su capacidad para progresar", se felicitó su presidente, Bruno Lafont.
Recalcó que con un año de antelación sobre lo previsto la compañía ha superado los objetivos de crecimiento de su resultado neto por acción y de rentabilidad de capitales que fijaba su plan "Excelencia 2008".
Lafont aseguró que el objetivo de reducción de costos para 2008, que era de 340 millones de euros, también se rebasará "ampliamente" y debería alcanzar los 400 millones en ahorros.
Tras señalar que la demanda mundial de cemento vive un desarrollo "ininterrumpido" desde hace casi 20 años pese a las fluctuaciones económicas, afirmó que con la demanda de los mercados emergentes y la compra de Orascom Cement, Lafarge está muy bien posicionado para beneficiarse plenamente de este crecimiento.
Por tanto, agregó, Lafarge confirma los objetivos "elevados" que se ha fijado para 2010: "Franquearemos en 2008 una etapa importante en la realización de esos objetivos", recalcó.
Las metas para 2010 incluyen un beneficio neto por acción superior a 15 euros (en 2007, fue de 11,05 euros), una rentabilidad de capitales superior al 12% (después de impuestos) y un flujo de caja libre de más de 3.500 millones de euros.
En 2007, la rentabilidad de los capitales empleados alcanzó el 11 por ciento, frente al 9,4 por ciento en 2006.
Sobre las perspectivas para 2008, que calificó de "positivas", el grupo destacó que las necesidades de construcción de los mercados emergentes siguen siendo "considerables".
E indicó que prevé un nuevo crecimiento de la demanda mundial, pese a la debilidad de la misma en Estados Unidos y la "ralentización en España".
Para la actividad de granulados y hormigón, Lafarge prevé un nuevo año de crecimiento, y en particular una "fuerte" progresión en los mercados emergentes.
El grupo, que anticipa nuevos aumentos de los costes de energía y de transporte, aseguró que su programa de reducción de costos seguirá generando ahorros y apostó por una nueva progresión de sus resultados. EFECOM
al/ltm