Empresas y finanzas
Rompe y rasga
Raimundo Díaz.
Madrid, 2 jun (EFECOM).- Las noticias sobre fusiones y adquisiciones de empresas y la relativa buena marcha de la economía estadounidense obsequiaron esta semana a la bolsa española con un traje de lujo: una subida del 2,98 por ciento y el máximo histórico de 15.501,50 puntos.
La parálisis del inicio de este período, pues el lunes disfrutaron de un día de holganza algunos de los principales mercados del mundo -Nueva York, Londres y Fráncfort-, fue superada rápidamente con la caída del petróleo al suspenderse la huelga en Nigeria y con el interés de Río Tinto por Alcan.
Si el lunes partíamos con el menor volumen de negocio del ejercicio, 1.370 millones de euros, el martes se asomaban a la puerta de la sastrería unos clientes distinguidos: se conocía la oferta de 71.100 millones que el Banco Santander Central Hispano (BSCH), Royal Bank of Scotland y Fortis hacían por ABN Amro.
La talegada ofrecida animaba a parte del sector bancario español y acercaba a la bolsa a la zona de máximos, aunque las constructoras seguían dando malas puntadas.
También traía buen paño Wall Street, con noticias empresariales estimulantes -la teleco Avaya y la inmobiliaria Archstone-Smith podrían ser objeto de compra-.
Pero a la bolsa le costaba superar el máximo histórico alcanzado el viernes anterior y la decisión de las autoridades chinas de aumentar los impuestos a las transacciones bursátiles para atenuar la fiebre de sus mercados y encorsetar a los ávidos especuladores les costó un pequeño descalabro, que en Occidente fue aprovechado para cambiar de chaqueta y recoger beneficios.
La bolsa despidió mayo y recibió a junio ataviada con sus mejores galas, de rompe y rasga, con una soltura y decisión que le auparon hasta el citado máximo histórico.
Había fundamento bajo los destellos de esos ropajes, pues los datos económicos estadounidenses y otras fusiones -Wachovia compró la firma bursátil AG Edwards- se ajustaban a la bolsa como una cómoda ropa interior al cuerpo.
El dato del PIB estadounidense del primer trimestre crecía sólo, el 0,6 por ciento, lo que haría posible bajar los tipos de interés, pero a la vez mejoraba la actividad manufacturera, se creaba más empleo del previsto y la inflación asociada al consumo apenas aumentaba.
Además, la entrada en el capital de Iberdrola del magnate belga Alberto Frere volvió a encender las luces en todo el sector energético y a dar calambrazos en las empresas vinculadas, fundamentalmente constructoras.
De esta manera, de las treinta y cinco mayores compañías de la bolsa, las integrantes del índice Ibex-35, veintisiete subieron, dos repitieron cotización, Iberia, pendiente de recibir nuevas ofertas de compra, y Ferrovial, mientras que seis acabaron la semana con pérdidas.
El principal ascenso correspondió a Iberdrola, el 8,73 por ciento, debido a la compra de una participación del 5 por ciento de Alberto Frere, presidente de la francesa Suez, compañía que a su vez posee el 10 por ciento de Gas Natural.
La oferta por ABN Amro le otorgó a BSCH una revalorización del 6,07 por ciento, en tanto que Unión Fenosa, por las quinielas de integración del sector eléctrico, subió el 6,05 por ciento.
Inmobiliaria Colonial presidió la lista de empresas con pérdidas al bajar el 2,51 por ciento, perjudicada por un informe de una firma de inversión, mientras que FCC cedió el 1,28 por ciento.
Antena 3 perdió el 0,92 por ciento después de conocerse datos de audiencia de mayo y a pesar de que el grupo Rayet aumentó su participación en la cadena de televisión, de la que controla cerca del 7 por ciento.
La próxima semana, en la que el Ibex partirá del máximo histórico de 15.501,50 puntos, los inversores estarán pendientes de la reunión del Banco Central Europeo (BCE), que seguramente subirá los tipos de interés del 3,75 al 4 por ciento, y de su homólogo británico, así como de datos de actividad en el sector servicios estadounidense. EFECOM
jg/cg