Reyal Urbis logró ayer la autorización de su junta de accionistas para abordar el intercambio de activos inmobiliarios por deuda que propone en el convenio de acreedores, que ha presentado para superar al concurso en que la inmobiliaria está inmersa desde hace dos años. En la propuesta de convenio presentada al juez el pasado mes de febrero y aún pendiente de aprobación, la compañía ofrece activos inmobiliarios a sus bancos acreedores para saldar sus deudas, si bien ha solicitado también una quita de su valor del 80 por ciento, según recoge Ep. La compañía logró que su junta aprobara, con el 99,98 por ciento de los votos a favor, "enajenar activos esenciales para la sociedad con objeto de formalizar las daciones en pago previstas en la propuesta de convenio". En virtud de esta propuesta, la inmobiliaria presidida y controlada por Rafael Santamaría, contempla alcanzar un acuerdo unilateral con Hacienda, a la que adeuda unos 400 millones de euros, y abordar una dación de activos para enjugar el pasivo de unos 2.900 millones de euros que soporta con los bancos.