La versión del próximo año moderniza sus líneas y optimiza aerodinámica, equipamiento y mecánicaHabrá que esperar hasta comienzos de 2007 para adquirir en España el renovado Honda CR-V. Los cambios realizados no afectan a la filosofía del vehículo, hablamos de un crossover -término para designar vehículos que no son station wagons ni tampoco coches deportivos-, con tracción a las cuatro ruedas y cinco plazas. Pero la estética, la mecánica y el equipamiento han sufrido modificaciones. Así, la aerodinámica ha mejorado sustancialmente: el centro de gravedad se sitúa 35 milímetros más abajo que en el anterior modelo, lo que debería otorgarle mayor estabilidad en el asfalto y, a la vez, mejorar las prestaciones y rebajar el consumo.Sus líneas son mucho más modernas y, siguiendo las tendencias actuales, la parte final de la carrocería se asemeja a la de un cupé. Las puertas poseen un ángulo de apertura más grande y sus bordes inferiores ebajan de altura, lo que favorece el acceso. Puede tener un techo solar de grandes dimensiones que se oculta con dos cortinillas eléctricas. En la nueva versión, la rueda de repuesto se ubica dentro del maletero, en lugar de ir colgada en el portón trasero, que ahora se abre hacia arriba y no lateralmente.Buena habitabilidadEl nuevo CR-V tendrá unas dimensiones interiores muy parecidas al modelo anterior, lo que se traduce en una buena habitabilidad tanto para los pasajeros como los equipajes. También mantiene la movilidad longitudinal para los asientos traseros, que además se pueden abatir para conseguir un mayor espacio en el maletero.Destaca en esta versión un volante regulable en altura y profundidad, que dirige un motor turbodiésel de 2.2 litros y 140 CV, de momento el único que tiene Honda. Sin embargo, en el terreno de la gasolina dispondrá de uno nuevo de 2 litros y 150 CV. Con este último puede llevar una caja de cambios manual de seis velocidades o una automática de cinco, pero con el de diésel sólo dispondrá de la primera. Entre su equipamiento, de serie u opcional según las versiones, el CR-V podrá incluir un programador de velocidad activo capaz de mantener de manera automática una distancia de seguridad con el vehículo que le precede; un sistema de protección avisará al conductor si los metros que le separan del automóvil que marcha delante se reducen por debajo de un valor previsto. También podrá contar con un control de estabilidad, un ordenador, un navegador, una conexión para el móvil, un reconocimiento de órdenes por voz, un climatizador bizona y una cámara trasera para el aparcamiento.