La patronal asegura que no ha crecido la apelación al BCE para obtener liquidezmadrid. El secretario general de la Asociación Española de Banca (AEB), Pedro Pablo Villasante, aseguró ayer que los mercados internacionales de capital "todavía no están abiertos", a pesar del "esfuerzo" que están haciendo las entidades españolas para intentar cambiar esta situación. Entre abril, mayo y lo que lleva transcurrido de junio, varios grupos nacionales han acudido a los mercados con emisiones de bonos y cédulas hipotecarias colocando más de 17.000 millones de euros tras meses de sequía, aunque con diferenciales más altos y con vencimientos más cortos de los que había antes de las turbulencias. A pesar de estos movimientos, el pulso continúa sin volver a los mercados y, como consecuencia, la banca nacional sufre las consecuencias. Según Villasante, el sector español "no ha hecho nada para merecer esta situación, pero está pagando las consecuencias" porque el sistema financiero internacional sigue sin discriminar la calidad crediticia de cada emisión. El secretario general de la AEB realizó estas declaraciones durante la presentación de los resultados obtenidos por el sector bancario español en el primer trimestre del año, que ascendieron a 5.153 millones de euros, un 10 por ciento más que en el mismo periodo de 2007. Transparencia Para el directivo de la patronal, existe una doble vertiente desde la que se puede abordar soluciones. Primero, que la banca extranjera acabe por mostrar el conjunto de los activos infectados que tiene. Y, segundo, que las autoridades políticas y financieras "hagan todo lo posible para abrir los mercados". En este sentido, Villasante indicó que el Euribor, actualmente en máximos en el 5,432 por ciento, no se calmará hasta que desaparezca la desconfianza en los mercados. Por otra parte, el representante de la AEB, aseveró que las decisiones del BCE han afectado a España de forma negativa, tanto en la época de las vacas gordas como en la actualidad. Sin embargo, Villasante añadió que "el BCE tiene que cumplir con su mandato, que es luchar contra la inflación y en favor de la estabilidad de precios". También comentó que una subida de los tipos de interés repercutiría negativamente sobre el sector bancario. Además, sostuvo con cifras que la apelación al BCE del sector financiero español no se ha elevado en estos meses. Así, éste sólo financiaba el 2,5 por ciento del crédito y su apoyo únicamente significaba el 1,3 por ciento de los activos. En cuanto a los resultados que presentaba ayer, el secretario general de la AEB manifestó que se "pueden considerar de gran calidad", ya que "proceden de la actividad ordinaria". Asimismo, señaló que todos los márgenes de negocio crecieron y que, hasta el momento, las previsiones de doble dígito "siguen vigentes". Con estas cifras en la mano, Villasante defendió que "España es una isla" en la crisis internacional, pues ha quedado al margen de los productos -particularmente las subprime- que han generado la situación, y agregó que hay una "crisis de confianza porque la gente piensa que aún hay pérdida oculta y que las exposiciones no están claras". Finalmente, Villasante, subrayó que España se enfrenta a una situación de "fuerte desaceleración" económica a nivel interno y que es el sistema financiero internacional el que se pasa por una "crisis intensa y grave, no a una turbulencia".