Dice que el Santander saldrá fortalecido con la Unión Bancaria y listo para aprovechar oportunidadesReitera que en 2016 el banco volverá al nivel de beneficio anterior a la crisis: 9.000 millonesEl presidente del grupo Santander, Emilio Botín, exhibió ayer su optimismo durante la junta de accionistas. Optimismo respecto a la economía española, a la mejora del grupo, la elevación del crédito por primera vez desde el inicio de la crisis y respecto a las nuevas oportunidades que la Unión Bancaria Europea ofrecerá a la entidad financiera que preside. También aprovechó la cita ante sus accionistas para defender el mantenimiento del scrip dividend un año más y reiterar que el Santander volverá a registrar beneficios pre crisis en el año 2016, lo que supondría ganar unos 9.000 millones de euros. El banquero quiso destacar "la gran labor del Gobierno español en las reformas", con la reducción del déficit público y la ganancia de competitividad a través del sector exterior. Esta mejora en las perspectivas explica, en su opinión, la valoración de los inversores extranjeros y el éxito de operaciones como la reciente colocación de Bankia en el mercado. Ahora bien, Botín advirtió que ni Gobierno ni sector privado deben "caer en la complacencia" y que en ese camino que aún queda por recorrer, la prioridad debe ser la creación de empleo. Respecto al Santander, afirmó que 2014 será el primero en muchos años en que se registre crecimiento en todos los países donde está presente, lo que redundará en la evolución de las cuentas del banco. En España, donde quiso centrar sus previsiones, espera que el banco registre un aumento de la cartera de créditos, por primera vez desde 2008, y una elevación de los ingresos financieros. El presidente de la entidad financiera detalló que en el primer trimestre de este año "el Santander está dando el doble de hipotecas que el año pasado (alrededor de 200 millones de euros), y la financiación de coches y el crédito a las pymes están creciendo", lo que también es una señal de que la recuperación española "es un hecho". Por ello, Botín afirmó estar convencido de que este año "vuelve el crédito, vuelve el crecimiento y, más lentamente, también se recupera el empleo". También se refirió al plan global de pymes, puesto en marcha recientemente y con el que el banco "está haciendo todo lo posible para que ni un solo proyecto viable se quede sin financiación en España". Con él, el banco quiere captar 60.000 pymes este año en España, dar servicios no financieros a otras 20.000 y crear un fondo de 250 millones con los que invertir a través de subordinada o capital en este tipo de empresas A salir del año de transición en el banco, como en su opinión fue 2013, también contribuirá la caída de costes esperados tras la integración de Banesto y Banif. Por último, Botín prevé una normalización progresiva del nivel de provisiones, que se vaya aproximando a un coste de riesgo similar al de antes de la crisis, que dejará notar sus efectos este año, pero que culminará en 2016. En este proceso hacia los niveles pre crisis, Botín afirmó que se reafirma en la previsión de ganar 3.000 millones en España en 2016, cuando el año pasado sólo aportó 400 millones al beneficio del grupo. Esto supone volver durante ese ejercicio al volumen de resultados de antes de la crisis, lo que significa que el Santander acerque sus beneficios a los 9.000 millones de euros. Respecto al proceso hacia la Unión Bancaria Europea, Botín no sólo se mostró confiado en que la entidad pasará holgadamente los test de estrés europeos, sino que está convencido de que podrá aprovechar las oportunidades que le brindará su implantación. En opinión del presidente del Santander, la Unión Bancaria proporcionará un campo de juego más equilibrado y uniforme, donde el banco que preside sacará provecho, ya que los cambios regulatorios "ponen en cuestión algunos modelos de negocio y ponen restricciones a algunas actividades de banca de inversión" y contribuirán a hacer más evidente la fortaleza del modelo de negocio del Santander.