Los 'números rojos' ascendieron a 1.664 millones de eurosLos mayores bancos de Portugal cerraron 2013 con un nuevo récord en pérdidas de 1.664,6 millones de euros con el que encadenan el tercer año consecutivo de resultados negativos a remolque de la lenta recuperación económica del país. La recesión, el aumento de la provisión de fondos y el pago de amortizaciones al gobierno luso a cambio de las ayudas públicas volvieron a lastrar las cuentas del sector. A pesar de que el mayor banco privado, el BCP, redujo sus pérdidas y otros lograron beneficios (Santander Totta y Banco Portugués de Inversión), el mal desempeño de la Caixa Geral de Depósitos (CGD) y el Banco Espírito Santo (BES) inclinó la balanza hacia el nuevo récord. La estatal CGD, mayor banco portugués, acentuó sus pérdidas respecto al año precedente (395 millones) y alcanzó al peor resultado de su historia, con 575,8 millones de euros. La entidad apuntó a los costes la reestructuración de su filial en España (182 millones). El BES pasó de beneficios de 96,1 millones de euros en 2012 a pérdidas de 517,6 millones en 2013, en gran parte debido a un aumento de las provisiones. El BCP, participado por el Sabadell, consiguió reducir sus pérdidas en un 42 % después de que en 2012 alcanzaran un récord de 1.219 millones de euros. En el lado de los beneficios, el BPI, el segundo grupo financiero mayor del sector privado luso, y el banco luso Santander Totta redujeron notablemente sus ganancias.