La Indicación Geográfica Protegida de Segura y La Sagra amparará a más de 5.000 ganaderos de tres comunidadesGRANADA. San Jorge. Más de 5.000 ganaderos de 144 municipios de Andalucía, Murcia y Castilla La-Mancha. En las provincias de Almería, Granada, Jaén, Albacete y Murcia no olvidarán la festividad de ayer, que les garantiza un reconocimiento por el que vienen luchando desde hace años. El Gobierno, mediante su publicación en el BOE, aprobó ayer la Orden por la que da luz verde a la inscripción de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) "Cordero de las Sierras de Segura y La Sagra". Según el pliego de condiciones de la nueva IGP, se amparará bajo esta mención la carne fresca comercializada en canal, media canal o en partes despiezadas con o sin hueso o en unidades de venta al consumidor, obtenida a partir de los corderos (macho o hembra) procedentes de la raza ovina "Segureña" considerada un ecotipo configurado a partir del tronco "Entrefino" del ovino español y seleccionado, a partir del siglo XIII, en la antigua provincia marítima de Segura de la Sierra. Pastoreo Los animales adultos mantienen un pastoreo durante casi todo el año, pernoctando en los apriscos o, en algunos casos, directamente en el campo. Tanto el alcalde de la localidad granadina de Huéscar, Agustín Gallego, como el presidente de la Asociación Nacional de Criadores de Ovino Segureño (Ancos), José Puntas, no ocultaron ayer su satisfacción por la noticia: "Era un maratón y hemos acabado consiguiéndolo". En la comarca de Huéscar se producen 200.000 corderos anualmente y 600 familias viven de la cría de este ganado, que mueve cerca de 20 millones de euros al año. Aunque necesariamente la nueva IGP autorizada por el Gobierno central no conllevará un aumento en las ventas, puesto que toda la producción ya era absorbida por el mercado, Puntas confía en que la indicación "mejore los precios de la ganadería y redunde en la economía de los productores".