E l ejercicio 2012 es el tercero consecutivo en el que fabricante de motores de avión ITP ha logrado crecer en su volumen de facturación, con 581 millones y un alza del 12,1 por ciento; y también en rentabilidad, hasta contabilizar un beneficio neto de 71 millones, con una mejora del 22 por ciento. Esta evolución aleja la momentánea sobra que se cernió sobre el sector aeronáutico en el ejercicio 2009. A grandes líneas, ITP es un grupo consolidado, internacionalizado y con una cartera de pedidos a largo plazo que despeja su futuro. Pero tal vez lo más destacable del último año ha sido su diversificación hacia la entrada en el mercado de aviones comerciales de tamaño mediano (de pasillo único), ya que hasta ahora su presencia civil se sustentaba en las grandes aeronaves (pasillo doble) del tipo A380. En esta línea, ITP suscribió a finales del año pasado un acuerdo con Pratt & Whitney para el motor Geared Turbo Fan (GTF), dirigido a aviones comerciales de tamaño mediano, que está registrando un éxito importante en el mercado con aplicaciones para el Mitsubishi Regional jet, el Irkut MS-21, el C-Series de Bombardier, el NEO para la familia 320 de Airbus y recientemente para los dos nuevos modelos de Embraer. A día de hoy, la segmentación de negocios de ITP muestra un claro y progresivo avance del sector civil, frente al de defensa, que dadas las restricciones presupuestarias públicas crece menos. Así, el negocio civil alcanzan el 47 por ciento del volumeno; el de Defensa representa el 33 por ciento y el de mantenimiento el 20 por ciento. El grupo ITP tiene 18 centros repartidos por seis países. Las principales plantas productivas están en España, México y Reino Unido, después cuenta con una empresa mixta en India para tubos, así como instalaciones para labores de mantenimiento y soporte en Estados Unidos y Malta. En la actualidad, la planta que más se está desarrollando es la de México, gracias a su competitividad en costes y a que se encuentra en el área dólar (por lo que no se ve penalizada por la paridad del euro-dolar). Sin embargo, en España se mantiene el núcleo de la ingeniería, I+D y la producción de mayor complejidad. 391 millones de inversión Si analizamos la evolución de ITP desde 2008, desde que se desencadenase la crisis económica en los países occidentales, se aprecia como la compañía tiene una clarísima senda ascendente. Su facturación crece un 20,19 por ciento en el periodo, pero más revelador es la ganancia de competitividad que está registrando, que se refleja en su rentabilidad, ya que su beneficio neto ha crecido un 51,93 por ciento en el quinquenio. Esto no ha sido óbice para que ITP dedique, gracias al respaldo de sus socios Sener Aeronáutica (que ostenta el 53,125 por ciento del capital) y Rolls-Royce (que tiene el otro 46,875 por ciento), importantes cantidades a la potenciación de sus plantas industriales como a actividades de I+D. En conjunto la inversión hecha suma 391 millones.Esta estrategia inversora continuará, ya que en el Plan Estratégico 2001-2015 se contemplan unas inversiones totales de 500 millones.