Reforzará la liquidez de sus acciones B para poder emitir hasta 1.000 millones Abengoa prepara su capital para poder salir a bolsa en Estados Unidos e incluso poder llegar a realizar -si se da el caso- una ampliación de capital en dicho mercado. La compañía propondrá en su próxima junta de accionistas, que se celebrará el 30 de septiembre en segunda convocatoria, un desdoblamiento del número de acciones con cargo a reservas voluntarias que tendrá un importe de 4,3 millones. Esta operación supondrá la puesta en circulación de más de 446,5 millones de acciones nuevas de tipo B, de las que cerca de 106 millones irían directamente al fondo First Reserve (siempre que este convierta un warrant de 4 millones de acciones que tiene en la actualidad, de lo contrario recibiría 68,4 millones). La compañía que dirige Manuel Sánchez indicó ayer a la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) que estas nuevas acciones de clase B tendrán un valor nominal de 0,01 euros cada una. En concreto, se emitirán en la proporción de cuatro acciones clase B nuevas por cada acción (ya sea tipo A o tipo B) actualmente en circulación. Así, tendrán derecho a la asignación de las nuevas acciones los titulares que posean, al menos, un título de la clase A o de la clase B a fecha de publicación de la ampliación en el Borme. Abengoa ha explicado que las acciones tipo B son títulos con los mismos derechos que las acciones clase A, salvo el derecho de voto, donde las acciones A tienen cien votos y las acciones B un voto. De esta forma, las acciones clase B participan de todos los derechos económicos como dividendos o reparto de reservas y suponen un modelo muy conocido en Estados Unidos. En este sentido, el pasado mes de octubre Abengoa emitió 17,14 millones de acciones clase B para dar entrada en el capital al inversor norteamericano First Reserve Corporation, que invirtió 300 millones en el capital de Abengoa y mantiene una opción sobre 4 millones de acciones más. La firma energética someterá además a aprobación en dicha junta la facultad de emitir obligaciones o warrants convertibles en acciones de clase B por un importe máximo de 1.000 millones de euros, pero se trata de una decisión que todavía no se ha tomado, pero que le permitiría financiarse en EEUU. Además, la compañía sevillana incluye la posibilidad de convertir acciones de tipo A en títulos de clase B a razón de 1x1 hasta finales de 2017. Asimismo, la junta de accionistas estudiará la delegación en el consejo de la facultad de solicitar la admisión a negociación de las acciones clase A y clase B y de las obligaciones convertibles emitidas o que emita en las Bolsas de Valores de Madrid y Barcelona y, en su caso, a través de ADSs (American Depositary Shares), en la New York Stock Exchage (Nyse). Por otra parte, la firma ha comunicado a la CNMV la suspensión temporal del contrato de liquidez suscrito con Santander Investment Bolsa. Este contrato tenía como objeto favorecer la liquidez de las transacciones sobre acciones, la regularidad en la cotización y evitar variaciones cuya causa no sea la propia tendencia del mercado. La compañía ha aprobado también un periodo de 180 días en el que los principales accionistas no podrán plantear nuevas operaciones de ampliación de capital. Asimismo, mantienen como condición indispensable lograr el apoyo de los accionistas minoritarios a la operación para seguir adelante.