El objetivo es evitar grandes fuegos descontrolados como el que afecta a ValenciaEnce-Energía y Celulosa, asignará un total de 2,4 millones de euros anuales para prevenir, controlar y minimizar los daños causados por los incendios en las reservas forestales que controlan en España. Para ello, tienen unos Planes de autoprotección activados en las Comunidades Autónomas en las que trabajan: Andalucía, Asturias, Cantabria y Galicia. El objetivo de la empresa es evitar, principalmente, la posible formación de un incendio a gran escala. La tarea realizada durante todo el año va desde la limpieza de montes, hasta la eliminación de residuos, realización de cortafuegos y corte de brotes secos cercanos a las carreteras y caminos más transitados. La búsqueda de puntos de agua y almacenamiento es otra de sus funciones de control a destacar. En los meses de mayor riesgo, activan un plan especial de vigilancia y adaptan sus actividades a extremar precauciones. En la actualidad, la empresa gestiona más de 86.000 hectáreas de terrenos, de las cuales 63.000 corresponden a la zona de Andalucia. En dicha zona, además de las tareas propias de la maderera, se dispone de un parque de maquinaria destinado a sofocar los incendios, en caso de producirse. Por ello, las medidas establecidas en los planes de empresa, que fueron consensuados con los programas de protección y defensa contra incendios de las comunidades autónomas, van en defensa de las zonas forestales que administran.