Las extrapeninsulares y el 'céntimo verde' irán a los Presupuestos del EstadoLas eléctricas enviaron ayer un mensaje contundente al Gobierno: la necesidad imperiosa de que se conozca cuanto antes la reforma energética, ante el castigo que ya han recibido y por el que queda por recibir por parte de las agencias de calificación crediticia que ya han rebajado sus ratings. Sin embargo, estas compañías están a punto de ganar una batalla: la de que se plantee devolver en el medio plazo los costes de generar en las islas a los Presupuestos Generales del Estado y de perder otra, ya que el anunciado céntimo verde se puede incluir también en esta partida como ingresos. En principio la reforma iba a ser aprobada en mayo, pero finalmente se retrasó para junio y ahora y el propio ministro de Industria, José Manuel Soria, pronostica que se anunciará en la primera quincena de junio, tal y como adelantó este diario. Con todo, la incertidumbre pesa ya sobre la cotización de estas compañías y sobre su coste de financiación. A través de un comunicado, la patronal Unesa recordó la complicada situación de los mercados internacionales. Esta circunstancia, señala, no es de extrañar si se tiene en cuenta que las eléctricas integradas en esta patronal son las que soportan en sus balances el "grave problema" del déficit de tarifa, cuya financiación debería ser compartida por "todos los que cobran de la tarifa". Por ello, las eléctricas han pedido que sean todas las generadoras de energía quienes subvencionen este desajuste, incluidas las promotoras de renovables, como Abengoa o ACS. Además, en los recortes de marzo fueron las eléctricas y los consumidores quienes soportaron el peso de las medidas. Lo preocupante es el nivel de endeudamiento de estas compañías por culpa de un sistema que no repercute en la tarifa los costes reales de la energía, sino que se ha usado como baza electoral. En concreto, la deuda de las eléctricas asciende a 73.000 millones, de los que 44.000 millones corresponden a la actividad eléctrica.