La reunión entre Sepla y la aerolínea termina sin acuerdo aunque vuelven a quedar el 4 de eneroMADRID. La reunión celebrada ayer entre el sindicato de pilotos (Sepla) e Iberia para pactar los servicios mínimos de la huelga ha terminado sin acuerdo. La falta de entendimiento entre los representantes de los pilotos y la aerolínea ha dejado en manos de Fomento la última palabra. "Hemos solicitado de urgencia al Ministerio que establezca los servicios mínimos para la huelga cuanto antes", explicaron fuentes de la compañía. Para los paros del pasado 18 y 28 de diciembre Fomento estableció un 68 por ciento y un 64 por ciento de servicios respectivamente, unos porcentajes que Sepla impugnó al entender que "eran abusivos", explicaron desde la sección sindical. De cara a la huelga del 9 y 10 de enero, para los que hay previstos unos 300 vuelos diarios, la compañía aérea ha anunciado que reforzará el plan de contingencia para "reubicar a los pasajeros y minimizar el impacto sobre los mismos". El conflicto entre los pilotos y la compañía, que tienen previsto volver a reunirse el próximo 4 de enero, se recrudece día a día. Los representantes sindicales acusan a la empresa de no querer "negociar los motivos de la huelga", que es la creación de la filial low cost Iberia Express. "Iberia afrontará todas las huelgas que plantee el sindicato para forzar el cierre de Iberia Express, empresa necesaria para paliar las pérdidas del corto y medio radio", sentenció la compañía. En cuanto al nacimiento de la filial, que comenzará a operar en 12 semanas, los pilotos denuncia que se eliminarán 5.000 puestos de trabajo. En este sentido, Iberia ha asegurado que los servicios de mantenimiento y asistencia en aeropuertos seguirá en manos de la compañía.