bruselas. La Comisión Europea propuso ayer una directiva para rebajar las emisiones de CO2 de los coches, propuesta que será negociada y enmendada por los Gobiernos de los 27 países de la UE antes de ser definitivamente adoptada. El objetivo es que a partir de 2012 los motores de los turismos matriculados en la UE emitan como máximo 130 gramos de CO2 por kilómetro, frente a los 160 actuales. Se trata de una media que varía en función del tamaño: los coches más grandes podrán rondar los 200 gramos, y los más pequeños deberían quedarse por debajo de los 100. Bruselas descarta, por el momento, proponer un objetivo aún más exigente en el horizonte de 2020. Los fabricantes que no respeten la directiva soportarán en 2012 multas de 20 euros por cada gramo superado y por cada vehículo vendido. Las sanciones irán aumentando cada año hasta alcanzar los 95 euros en 2015.