El PP dice que su visto bueno se debió a un error y que votará "no" en el Congresomadrid. El pleno del Senado aprobó ayer, a propuesta del grupo Entesa Catalana de Progrés -partido que agrupa en Cataluña a Esquerra Republicana, el PSC (Partido Socialista Catalán, que votó en contra) e Izquierda Unida-, una enmienda dirigida a eliminar el canon digital, que grava la adquisición de algunos dispositivos electrónicos y soportes tales como los CDs o DVDs, y así modificar el artículo 25 de la Ley de Propiedad Intelectual, en el plazo de un año. La sorpresa llegaba con el voto favorable del grupo Popular, puesto que todo el mundo esperaba que sus representantes en la Cámara Alta votasen en contra de esta enmienda. Fuentes del Partido Popular consultadas por Ep achacaban ayer su visto bueno a la eliminación del canon a un error. Según Beatriz Rodríguez, portavoz de Cultura del PP en el Congreso, su grupo apoyó en el Senado la enmienda de Entesa Catalana a pesar de que la "voluntad" del PP era "exactamente la contraria". Según Rodríguez, este lapsus fue debido a que la sesión fue "muy confusa", y los populares no entendieron cuál era el sentido de la votación puesto que creían que estaban respaldando que el texto se quedara "como había venido del Congreso". En esta línea, la representante del PP dejaba ayer claro que su grupo votará en contra de eliminar el canon digital en la segunda votación que se celebrará en el Congreso de los Diputados. Beatriz Rodríguez subrayaba ayer que "en ningún caso" la postura del PP sobre un tema de "esta importancia" quedará fijado por una enmienda de Entesa Catalana. Por su parte, con motivo de la sesión de ayer, el ponente de Entesa, Jordi Guillot, calificó el canon de "injusto y discriminado", en línea con las tesis defendidas por las patronales del sector de las Tecnologías de la Información y por las asociaciones de internautas. Ambos colectivos proponen, como el senador catalán, la búsqueda de fórmulas alternativas consensuadas al canon, que protejan los justos derechos de autor. Tal iniciativa, enmarcada en el Proyecto de Ley de Impulso de Sociedad de la Información (LISI) que fue aprobado con el respaldo de toda la Cámara a excepción del Grupo Popular, obtuvo el apoyo de todas las formaciones políticas, salvo el PSOE.