La firma local Cemig se haría con los 3.000 km de líneas operativas y otras 4.000 en construcción por 430 millonessevilla. Nueva vuelta de tuerca en la estrategia de rotación de activos que el consejero delegado de Abengoa, Manuel Sánchez, anunció a los analistas en la presentación de los resultados anuales de 2010. Acuciada por un endeudamiento que ha crecido a un ritmo insostenible en las actuales condiciones del mercado, la compañía sevillana ultima, según publicó ayer la prensa brasileña, la venta de su negocio de transmisión de electricidad en el país carioca por alrededor de 430 millones. Fuentes del grupo confirmaron las negociaciones, pero no aportaron más datos. Esta información, sumada al anuncio el martes de la venta del 40 por ciento de Telvent a la gala Schneider Electric por 421 millones, llevó a los títulos de la firma a liderar por segundo día consecutivo el Íbex 35: las acciones subieron el 2,4 por ciento, hasta 23 euros. Cemig, una compañía semipública en la que participan el Estado de Minas Gerais y el grupo Andrade Gutierrez, estaría interesada en el conjunto de la red de transmisión eléctrica que Abengoa opera o está construyendo en el país. En total, 2.900 kilómetros en funcionamiento y otros 4.100 en cons- trucción. Cemig ya ha comprado dos empresas de transmisión en Brasil en los últimos meses. Otros activos Abengoa lograría, caso de culminarse la operación, liberarse de un compromiso de inversión de 574 millones a ejecutar en lo que resta de año, sobre un total de mil millones que tiene planificado destinar a esos 4.100 kilómetros de líneas entre 2010 y 2012. La firma que preside Felipe Benjumea ya traspasó el año pasado su participación del 25 por ciento en otras dos líneas de transmisión a la firma china State Grid International por 90 millones de euros. Junto al negocio eléctrico, Abengoa cuenta en el país carioca con otras empresas de construcción de obra civil así como de fabricación de componentes eléctricos auxiliares. Y, junto a ello, su filial Abengoa Bioenergía explota dos fábricas de bioetanol en el país que suman una capacidad de 200 millones de litros. La venta de estos activos concesionales, que han formado parte del corazón del negocio de Abengoa hasta ahora, permite visualizar la urgencia del grupo por capitalizar la inversión ejecutada en ellos para aliviar el endeudamiento neto (5.800 millones a cierre del primer trimestre, 5,8 veces el ebitda, aunque sin tener en cuenta los 770 millones de deuda neta que resta la venta de Telvent). Todas las áreas de negocio de la compañía, con la excepción de la termosolar, participarían de esta estrategia.