La Generalitat da marcha atrás y negocia con el antiguo gestor su continuidadBARCELONA. Los deportes de invierno sufren las consecuencias del cambio climático, cada temporada tienen menos clientes, y las empresas gestoras de las pistas de esquí también empiezan a verse afectados por los cambios estacionales. Las pistas de Espot y Port Ainé, ambas en Lleida, no tendrán un gestor esta temporada al quedar desierto el concurso público que convocó el Institut Català de Finances (ICF) para cubrir su gestión y mantenimiento. La Generalitat ofreció la gestión conjunta de ambos circuitos a través de un concurso público al que sólo se presentaron dos compañías: Suport Group Consultor e Inversions Meridiana. Ninguna de las dos convenció al ICF, que ahora negocia con la antigua propietaria de Port Ainé, Pallars Industrial, para que se encargue de mantener ambas pistas abiertas hasta alcanzar algún acuerdo con un nuevo gestor. La oferta puesta sobre la mesa de Pallars es de 400.000 euros para un período de dos meses.Si Pallars Industrial decide volver a encargarse de las pistas, esta temporada podrán volverse a abrir las pistas, además del complejo invernal anexo a Port Ainé. La ICF asegura que las propuestas que ha recibido "tienen algunas imprecisiones técnicas" aunque sigue negociando con Suport Group Consultor e Inversions Meridiana para llegar a algún acuerdo positivo que permita llegar a tiempo para la apertura de la temporada de esquí. La Generalitat también les ha ofrecido la posibilidad de comprar los activos de ambas estaciones. La oferta, de 1,5 millones de euros, incluye mobiliario, equipos informáticos y maquinaria del complejo industrial. La Generalitat también pujóLa estación de Port Ainé pasó a manos de la Generalitat por 2,8 millones de euros. El pasado mes de junio quedó como único postor en la subasta por el circuito, por el que acabó pagando la mitad del precio de salida. Finalmente, el Institut Català de Finances acabó pagando 3,5 millones de euros por la pista y por un complejo de deportes de aventura, situado al lado de la pista y ligado a Port Ainé. La semana pasada, y ante la temporada que espera el sector, el conseller de Política Industrial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, anunció ayudas para la mejora de las instalaciones en 14 estaciones de esquí del Pirineo catalán, entre las que destacan Boí, La Molina o Baqueira-Beret. La ayuda, de 700.000 euros, es la primera que el gobierno catalán otorga a las pistas en las últimas dos décadas.