Augura una nueva burbuja en la termosolar y rechaza los impuestos a la nuclearmadrid. El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, está preparado para afrontar que los mercados financieros cierren el grifo para y que se tenga que retrasar la colocación del déficit de tarifa, prevista en un primer momento para el próximo mes de septiembre. La eléctrica tiene listo su propio plan de estrés, consistente en actuar sobre las inversiones, que se frenarían, y en activar el programa de desinversiones, que prevé ventas por 3.500 millones de euros. En concreto la multinacional tiene un déficit de tarifa pendiente de recuperar de 4.169 millones de euros, que espera solucionar lo antes posible, " todos pensábamos que las cosas podían ir más deprisa, pero han ido surgiendo obstáculos en el camino. Aún así, creemos que estamos al final del proceso y hacemos lo imposible por acelerarlo". Dentro de esta estrategia, el presidente de Iberdrola se comprometió a garantizar tanto el dividendo como el pay out y descartó tener necesidad de realizar una ampliación de capital. Un mix descompensado Para el presidente de Iberdrola la principal causa de la subida de los precios de la electricidad "no se ha debido a los precios de la llamada generación tradicional, sino al aumento de las primas de las tecnologías solares". Y es que según sus palabras "se ha gestionado mal la planificación de las tecnologías solares y, si se sigue gestionando mal, habrá otra burbuja en la energía termosolar". Siguiendo con su argumentación, Galán puntualizaba que si se revisa "el proceso de planificación energética y su ejecución" se pueden apreciar grandes diferencias entre la tecnología eólica, el gas y la instalación de paneles solares. Asegura que la implantación de tecnología solar ha sido "más de siete veces superior a la planificada, lo que supondrá un incremento de las primas de más de 3.600 millones de euros al año". Tasa nuclear Galán se ha referido también a la amenaza de imponer una tasa a la energía nuclear similar a la que existe en Alemania. El presidente de la energética ha asegurado que en nuestro país la situación es distinta ya que nuestros impuestos son finalistas y por tanto "deben hacerse para algo y tienen que repercutir en el consumidor final". Además ha añadido que en nuestro país ya se han aumentado los impuestos a la nuclear en los últimos años. En cuanto a los constantes cambios legislativos y su posible repercusión sobre la inversión, ha incidido en que pese a que este tipo de noticias se han venido produciendo con asiduidad en los últimos diez años "esas noticias ceden siempre ante el respeto de la legalidad vigente, la racionalidad y el sentido común". Por ello ha confiado en que el nuevo marco regulatorio que surge del Pacto de Estado de la Energía sea positivo para los intereses de la compañía y así lo ha indicado al decir que "la legislación eléctrica está basada en una serie de de Directivas Europeas que apuestan inequívocamente por un modelo de liberalización y mercado". Bajada de beneficios Las cuentas de la eléctrica no brillan tanto como en años anteriores. Así, pese a haber logrado un beneficio neto de 1.467,2 millones de euros, esta cifra supone un 2,6 por ciento de lo que se ingresó en el mismo periodo del año anterior. Esto se debe a que en el 2010 se han recibido menos plusvalías que en el último año, pasando de 223 a 83 millones de euros. La compañía también ha destacado que en estos primeros seis meses del año se han invertido 2.145 millones de euros, lo que supone un incremento del 2 por ciento en esta partida. La mayoría de estas inversiones se han llevado a cabo en Estados Unidos y Reino Unido, por ser países, como apuntaban desde la multinacional con una "mayor estabilidad". En cuenta la producción, la hidráulica se ha llevado la palma mientras el gas sigue marcha atrás.