La UE cierra las puertas a que Hispasat, Aena y Eads gestionen la puesta en órbita del proyectobruselas. Los ministros de Transportes de los 27 países de la UE alcanzaron ayer un acuerdo de mínimos para desbloquear el proyecto Galileo, una constelación de 30 satélites europeos que en 2002 decidieron que debería estar lista en 2012 para competir con el sistema estadounidense GPS de navegación y localización.En primer lugar, decidieron dar carpetazo a las negociaciones con el consorcio formado por las españolas Hispasat y Aena, la franco-alemana y un poco española Eads, la francesa Alcatel-Lucent, la también gala Thales, la italiana Finmeccanica, la británica Inmarsat y la alemana TeleOp. Estas empresas se suponía que iban a gestionar la puesta en órbita de la red de satélites y los primeros 20 años de vida del proyecto. Ya, como pronto, gestionarán el sistema tras su despliegue. Pero todo eso deberá volver a ser negociado desde cero.Además de constatar el fracaso de esta colaboración entre el sector público y el privado, los ministros de la UE admitieron que si el sector privado no participa en la inversión necesaria para construir y lanzar los satélites, el público tendrá que buscar más fondos ya sea en los presupuestos nacionales, ya sea en los comunitarios.Ahí termina el consenso, porque los representantes de los Gobiernos de los 27 países del club pasaron de puntillas sobre la cuestión de quién pone los 2.400 millones de euros que no tenían previsto aportar. Como suele ocurrir en estos casos, encargaron a la Comisión Europea que les presente un informe tras el verano sobre alternativas: aumentar el presupuesto de la UE, desviar fondos europeos previstos para I+D, etcétera.