Sus cotizadas suman 4.950 millones, frente a los 12.445 del 'holding' de La Caixa madrid. José Luis Olivas, el presidente de Bancaja y futuro vicepresidente ejecutivo del SIP, se encontrará con la gestión de unos 4.950 millones de euros sólo en participadas de cotizadas españolas, un valor que supera las ayudas que el nuevo grupo solicitará al Frob y que supone el 1 por ciento del valor de la bolsa española. Una cartera muy poderosa pero que palidece si se la compara con la que atesora Criteria, el potente brazo inversor de La Caixa. La sociedad catalana controla 12.445 millones de euros en cotizadas españolas, el 2,5 por ciento del mercado continuo, y sólo una de ellas, el paquete accionarial que tiene en Gas Natural, supera la suma de lo que aportarán Bancaja y Caja Madrid a la cartera del nuevo grupo. La participación más relevante de Bancaja, en cuanto a valor bursátil, es el 5,74 por ciento que tiene en Iberdrola, que supera los 1.600 millones de euros. También significativa es el casi 38 por ciento de Banco de Valencia, que alcanza un valor en bolsa de 688,6 millones. En cuanto a Caja Madrid, el 15 por ciento de Mapfre supera los 1.000 millones de euros y el 23 por ciento de Iberia, los 500 millones. En total, y sin contar la participación en Colonial y Martinsa Fadesa, devaluadas por sus dificultades financieras, Bancaja tiene más de 2.500 millones en valores españoles. Por su parte, Caja Madrid, y sin considerar los 24,5 millones de SOS, acumula 2.358 millones. Pero la cartera industrial que nacerá con la SIP no se limita a las cotizadas. Por parte de la caja valenciana, tiene filiales en bancaseguros, sector inmobiliario, gestión de activos, emisiones de deuda, etc. además del 24 por ciento de Terra Mítica, el 33,33 por ciento de Valmor Sport, -la empresa que gestiona el Gran Premio de Europa de Fórmula 1-, el 31 por ciento de Hospimar 2000, gestora de hospitales y el 30,3 por ciento de Aguas de Valencia, entre las más significativas. Caja Madrid cuenta, además, con el 100 por cien del banco de Miami City National Bank of Florida, en cuya adquisición se gastó unos 800 millones de euros y controla la Corporación Financiera Habana. Además, comparte con FCC Global Vía, que gestiona 41 concesiones en infraestructuras, y tiene una participación en Comsa-Emte, dedicada a la construcción e infraestructuras. También tiene participaciones o filiales en el área de la salud, del capital riesgo, de la gestión de patrimonio, de banca privada, y de seguros, entre otros sectores. Ahora tendrá que detallarse si todos estos activos o sólo una parte pasan a la cartera común y si esa nueva agrupación servirá de base para otro intento de salida a bolsa, tras la postergación del proyecto de Bancaja y de Cibeles, por parte de Caja Madrid y retoman el camino que en su día abrió La Caixa con Criteria. En las inversiones de esta sociedad, además de las cotizadas es- pañolas, destacan las dedicadas a banca, seguros y otros servicios financieros, fruto de la estrategia de los últimos años de menguar el peso de sus participadas industriales. Tiene el 30 por ciento del portugués BPI, el 20,85 por ciento de Boursorama, el 20 por ciento de GF Inbursa, el 14,98 por ciento del hongkonés The Bank of East Asia y el 10,1 0 por ciento del austriaco Erste Group Bank. En seguros, cuenta con la filial SegurCaixa Holding y con las de servicios especializados, InverCaixa Gestión, CaixaRenting, FinConsum y GestiCaixa.