La malagueña acepta que el ajuste de personal en la cordobesa se reduzca a casi la mitad y se fije en 428 bajasmadrid. Unicaja ha tenido que ceder a las pretensiones de CajaSur y los sindicatos para poder sacar adelante la fusión de ambas. La entidad malagueña se ha visto obligada a modificar el plan elaborado por Boston Consulting para intentar desbloquear la negociación laboral, clave para el éxito de la operación. El cambio, que se produce cinco días antes de que expire el plazo otorgado por el Banco de España para que sus consejos de administración aprueben el proyecto definitivo, radica fundamentalmente en los ajustes de la plantilla. Los representantes de ambas cajas ofrecieron ayer a los sindicatos un recorte de personal de casi 700 trabajadores, frente a los poco más de 1.000 propuestos por Boston Consulting. El consejo de administración de Unicaja hace seis meses autorizó la absorción de CajaSur siempre y cuando se cumpliera el protocolo y el plan elaborado por esta consultora. La cúpula de la cordobesa llevaba intentando reducir las cifras, sobre todo porque la mayor parte de los afectados provenían de sus filas. La oferta actual rebaja de 767 a cerca de 428 el recorte de empleados en la cordobesa y mantiene en torno a 200 el que se llevaría a cabo en la malagueña. Con este nuevo escenario, el ahorro de costes salariales del grupo resultante disminuiría de 57 a 50 millones de euros. Este descenso se compensaría con una homologación de nóminas que afectaría a los trabajadores de la cordobesa. El ajuste se llevaría cabo a través de prejubilaciones, bajas incentivadas y un expediente de regulación de empleo (ERE). Este último punto es uno de los principales escollos para convencer a los sindicatos. No obstante, ante la propuesta de ayer la postura de la mayor parte de los representantes de los trabajadores ha variado y todos, salvo Comisiones Obreras, han declarado que van a estudiar la oferta. 'Luz verde' a final de semana La próxima reunión de la mesa laboral está convocada para mañana, donde ambas cajas esperan, al menos, lograr el apoyo mayoritario (más de un 50 por ciento). De esta manera, podrían citar a los respectivos consejos de administración. CajaSur tiene previsto celebrar este encuentro el jueves a última hora, mientras que Unicaja durante la jornada del viernes. La fusión de las dos andaluzas requerirá de una ayuda de 990 millones de euros ante el deterioro patrimonial de la cordobesa. Estos recursos provendrán del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que ya ha aprobado la inyección. CajaSur sufrió el año pasado pérdidas por 600 millones, como consecuencia del agujero de su holding industrial. Además, la entidad sufre una de las tasas de morosidad más elevada del sistema, por encima del 8 por ciento. Esta cifra es sólo superada por la intervenida CCM.