Hannover. Brillaba el sol en Hannover el día en que empezó Cebit, la feria tecnológica más importantes del mundo, que inauguró la canciller Angela Merkel. 300.000 metros cuadrados de stands en los que marcas muy conocidas, y otras no tanto, muestran desde el jueves y hasta el día 21 sus novedades. Mucho más espacio que en SIMO, y un exterior apetecible: no son pocos los visitantes (la mayoría de ellos, profesionales del sector) que aprovechan los días primaverales para sentarse en el césped a descansar de la paliza de recorrer la feria. Una paliza divertida, eso sí. Y eso que algunos de los fabricantes de siempre no dieron muchas sorpresas: el gigante Microsoft llevó su nuevo sistema operativo, Windows Vista, que fue presentado en Europa el pasado enero en su versión para consumo. La compañía que fundó Bill Gates ocupó mucho espacio pero no presentó grandes novedades. En la zona dedicada a videojuegos, chicas guapas hacían carreras de coches con la Xbox 360 y promocionaban el HD DVD, reproductor de DVD de alta definición.Vídeos enmarcados en el salónPero siempre hay alguna sorpresa. Samsung se la dio a los visitantes con sus nuevos marcos de fotos digitales, un producto que no es nuevo pero que la empresa coreana quiere llevar más allá: en ellos, uno no sólo puede ver las imágenes que saca con su cámara digital (que se van alternando); también puede reproducir audio y vídeo. Tienen siete pulgadas y su precio no es apto para cualquier nómina: entre 250 y 300 euros. Los más caros permiten ver imágenes que estén alojadas en una dirección IP, es decir, que no hace falta introducirles ninguna tarjeta porque encuentran esas fotos y vídeos en Internet. Algo que no ha hecho ninguna otra compañía. Entre abril y mayo estarán en Europa; a Corea ya han llegado. Uno de los asistentes a la rueda de prensa preguntó a los directivos de la compañía lo que casi muchos tenían en mente: ¿realmente quiere la gente tener un marco digital, siendo su precio el que es? Los directivos de Samsung, por supuesto, aseguraron que es un mercado que está naciendo, y que con el tiempo todos tendremos uno en casa. La guerra entre pantallas de plasma y de LCD (cristal líquido) también se libró en Hannover. A un lado del ring, un gran panel rezaba "I love plasma", mientras al otro se alzaba la pantalla de LCD más grande del mundo, de 108 pulgadas, de Sharp. El LCD parece está ganando el combate, en parte por su mayor longevidad. La imagen acaparó muchos metros cuadrados de feria. ¿HD DVD o Blu-ray?Otra guerra que ya dura es la que mantienen Blu-ray y HD DVD, los dos reproductores de imagen en alta definición que se disputan el convertirse en el estándar, como en su día ocurrió con Beta y VHS. Toshiba, fabricante de HD DVD, anunció el miércoles en la feria que formará una organización junto con Studio Canal, Universal y Microsoft: cuantas más distribuidoras cinematográficas apoyen a un formato, más fácil le será imponerse. Pero Blu-ray tampoco se queda atrás. Según explicó a elEconomista Mark Knox, portavoz del grupo de promoción de HD DVD, hay más películas en formato Blu-ray que en HD DVD, "pero la diferencia es mínima, de unas 100.000 unidades. Sin embargo, ellos hacen que parezca que la distancia es enorme". También señaló que cerca de 100 compañías apoyan a cada formato. Sony ha sufrido problemas técnicos en la fabricación de Blu-ray (un reproductor que consigue más calidad de imagen, por lo que es más caro), y por eso ha retrasado la salida de su consola PS3, que incluye este reproductor. Knox también se refirió, sonriente, a esos problemas: "Aunque sea mucho más fácil crear un HD DVD que un Blu-ray, eso no quiere decir que sea fácil". "Viendo el éxito de su PS2, Sony creyó que la PS3 dominaría el mercado y se haría con la alta definición. Pero no está siendo así". Knox reveló un dato curioso: "Hoy, Samsung apoya al formato Blu-ray, pero fue, junto a Toshiba, la creadora del primer HD DVD". ¿Estamos ante un empate técnico? La batalla sigue abierta. Samsung mostró por primera vez la nueva versión de su miniordenador Q1. Tiene un pequeño teclado a los lados al que uno se acostumbra al cabo de un rato, es relativamente ligero y tiene 33 Gigas de capacidad. Con él no hace falta introducir ninguna contraseña: cuenta con lector de huella dactilar. ¿Lo quiere? Lo tiene, pero por un mínimo de 1.100 euros. A España llegará dentro de un par de meses.El futuro no es para tantoEl pabellón 9 intriga a los visitantes por su nombre: Future Park. Sin embargo, cuando uno lo recorre no encuentra tanto como espera. Aunque a pesar de todo sí hay cosas curiosas. Por ejemplo, varios sistemas de formación a distancia. En varias universidades alemanas y en una argentina ya es posible que un profesor dé clase a través de Internet. La clave está en la pizarra inteligente que utiliza y en un sistema de reconocimiento de voz. Lo que dice el catedrático pasa al texto que los estudiantes pueden ver en sus ordenadores, además de las anotaciones que hace en la pizarra. El sistema lo ha desarrollado el alemán Hasso Plattner Institut, pero sus responsables admiten que tiene una carencia: el alumno no puede formular preguntas, pero sí puede volver a asistir a esa clase todas las veces que quiera, ya que el archivo permanece colgado en Internet. ¿Será así el futuro? ¿Se olvidarán los universitarios de los madrugones? Desde el instituto responsable del proyecto no lo creen: "Nos lo planteamos más bien como un apoyo, un complemento". En Cebit también se exhibe un programa para jugar a los médicos. Sí, como lo oyen. Sólo hay tener conexión a Internet y un estudiante de medicina puede llegar a un hospital virtual y recibir a sus pacientes, hará un examen y dará su diagnóstico y tratamiento, Incluso puede operarles. Luego, el programa dirá si ha acertado… o si ha acabado con el paciente.