La Comisión Europea aprueba la operación de Iberdrola sin requisitosmadrid. Omega Capital, la sociedad de inversión de Alicia Koplowitz, notificó ayer al Takeover Pannel británico que controla ya un 1,21 por ciento de Scottish Power. De este porcentaje sólo un 0,10 por ciento lo posee en acciones mientras que el restante 1,11 por ciento lo mantiene aparcado con opciones de compra. En las últimas comunicaciones a la bolsa británica sobre Iberdrola, Omega Capital había indicado que iba reduciendo sus opciones sobre la eléctrica española para incrementar su exposición en Scottish Power. La oferta de la eléctrica española consiste en el pago de 400 peniques en efectivo, más 0,1646 acciones de Iberdrola y un dividendo de 12 peniques por cada título de Scottish Power, lo que hace que la valoración de estas acciones se sitúe en los 775 peniques por cada título.Koplowitz tiene además en su cartera de inversión un 2 por ciento de Iberdrola más un 0,08 por ciento adicional en derivados. Si Omega Capital decidiese no acudir a la opa, la operación supondría incrementar rápidamente su presencia en el capital de Iberdrola, donde ya se ha convertido en una de las principales accionistas por detrás de ACS, BBVA y BBK.Por otro lado, Iberdrola recibió ayer una buena noticia, un día antes de lo esperado. La Comisión Europea autorizó la operación de compra de Scottish Power sin imponer ningún requisito. La eléctrica española considera que la aprobación es uno de los hitos más importantes de su oferta de compra y asegura que la operación marcha según lo previsto.La eléctrica notificó a Bruselas su acuerdo amistoso con la eléctrica escocesa el pasado 12 de enero y tras algo más de un mes ha recibido la autorización.Iberdrola ha obtenido hasta el momento la aprobación bajo la ley estadounidense Hart-Scott-Rodino y el visto bueno de la Comisión Federal Reguladora de Energía y la de Telecomunicaciones (Scottish Power tiene varias licencias de uso privado de telecomunicaciones en Estados Unidos).La eléctrica se encuentra ahora a la espera de recibir la próxima semana el visto bueno de la autorización Exon Florio (analiza las inversiones de empresas extranjeras en el país) y de la Comisión de Servicios Públicos del Estado de Nueva York, que se calcula que podría conseguirse el próximo 13 de abril.La autorización de Neelie Kroes, no obstante, no ha gustado a todos por igual.El Partido Nacionalista Escocés, representado por el eurodiputado, Alyn Smith, aseguró ayer que está en desacuerdo con la autorización de la Comisión Europea porque considera que Iberdrola podrá beneficiarse de la legislación fiscal española pero añade que esta investigación nunca se hubiese realizado si no llega a ser por la denuncia que él mismo realizó a la Comisaria de Competencia. El pasado 30 de noviembre, Smith envió una carta a Kroes en la que mostraba su queja y la comisaria le respondió a mediados de diciembre, antes de recibir la notificación oficial de la operación, que analizaría su petición.El departamento de la comisaria Neelie Kroes se refirió en su comunicado oficial a la única duda que había surgido en el proceso: la petición realizada por el Partido Nacionalista Escocés (SNP), que requería a Bruselas que analizará si la legislación fiscal española suponía una ayuda de estado para facilitar la compra de empresas extranjeras.La conclusión de esta departamento ha sido que el sistema fiscal español no proporciona a Iberdrola ninguna ayuda que pueda afectar a la competencia.De este modo, la denuncia sobre el sistema fiscal español seguirá otro cauce. Los encargados de analizar la situación será la Comisión pero con el estado español y dejando ya a Iberdrola a un lado.Quejas desde EscociaNicola Sturgeon, diputada líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP), aseguró ayer que "continuaremos manteniendo un diálogo constructivo con Iberdrola en los trámites de la oferta" y recordó que hace algunas semanas se reunió con el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, que le dio garantías de empleo y del mantenimiento de la sede en Glasgow.Sturgeon añadió además que "el SNP luchará para proteger los intereses escoceses y para lograr el mejor acuerdo para los trabajadores y consumidores de Scottish Power".