El Ministerio de Fomento asegura que hay más de 150 profesionales cualificadosmadrid. "El Ministerio de Fomento lleva más de un año arrastrando problemas en la inspección de los aviones comerciales por la falta de profesionales cualificados. Aviación Civil sólo tenía tres inspectores titulados en el verano de 2005, una cifra insuficiente para asumir la carga de trabajo de todas las aerolíneas que operan en España". Esta queja, conocida en el sector y denunciada en varias ocasiones por los pilotos, traspasó la barrera política cuando el 21 de septiembre de 2005, el Partido Popular advirtió en una interpelación urgente "del peligro que ello conllevaba", señala a este periódico Andrés Ayala, portavoz de Fomento en el Congreso del Partido Popular..La respuesta de la cartera dirigida por Magdalena Álvarez fue poner en marcha un Plan de Choque de Seguridad Aérea. Para aumentar la plantilla se subcontrató la inspección de los aviones a la empresa pública Senasa (Servicios y Estudios para la Navegación Aérea y la Seguridad Aeronáutica).Pero esta decisión ha acarreado varios problemas. El primero de ellos es el excesivo coste de las revisiones. "El coste para el Estado es muy superior ya que cada inspección de un avión supone un desembolso de 5.000 euros", aseguran fuentes cercanas al proceso.El segundo problema añadido es que muchos de esos inspectores subcontratados no tienen la misma autoridad que puede tener un tradicional profesional de Aviación Civil. Algunos pilotos se quejan de que el criterio de los inspectores no es el mismo en todos los casos. "Depende con la aerolínea que trabajen su manera de actuar es bien distinta", explica un piloto.El tercero es la capacidad que tienen los inspectores para solicitar excedencias, que se puede pedir desde uno a cinco años. "La mayoría de ellos pedían estos permisos temporales para irse a trabajar a las secciones de mantenimiento de las aerolíneas", explican desde el sector. "El conflicto llega cuando regresan y les toca revisar la compañía aérea con la que han trabajado varios años. ¿Son totalmente objetivos en su trabajo", añaden las mismas fuentes. Fomento no comparte esta versión y asegura que el número de inspectores es mucho mayor. Si el 1 de junio de 2004 alcanzaban los 98 expertos en seguridad, a 31 de diciembre de 2005 sobrepasaban los 151. ¿Por qué existe esta diferencia? Porque el Ministerio y los profesionales del sector no tienen los mismos baremos a la hora de hablar de inspectores. "Todos son ingenieros y cumplen a rajatabla la certificación profesional correspondiente para ejercer su profesión", explican desde la cartera dirigida por Magdalena Álvarez.