El paquete ya aprobado de 2 billones de dólares elevará el déficit al 14% del PIBLejos de lo anticipado la semana pasada, el presidente de EEUU, Donald Trump, ha desistido en su intención de reabrir la economía a partir del domingo de Pascua y ha extendido hasta finales de abril las normas de distanciamiento social que pesan a este lado del Atlántico. Un escenario que complica aún más la situación financiera de familias y empresas, cuyas facturas comienzan a acumularse a la espera de los pagos directos de 1.200 dólares por individuo que todavía tardarán en llegar al menos tres semanas. "No solo millones de personas están perdiendo sus empleos, sino que los balances de los hogares estadounidenses ya eran vulnerables antes del ataque del virus", explica el economista global de Deutsche Bank, Torsten Slok, quien recuerda que las tasas de morosidad han crecido sensiblemente, en particular en préstamos para automóviles. "Con el 25% de los trabajadores estadounidenses ganando menos de 600 dólares a la semana, la profundidad de esta recesión depende de cuánto tiempo pasará antes de que el estímulo llegue a las manos de los consumidores", señala. Las compañías de EEUU continuan anunciando despidos, de he-cho, Macy's, la cadena de almacenes más grande del país, anunció el lunes que suspenderá los sueldos de sus 130.000 empleados después de perder casi todas sus ventas debido al cierre de sus establecimientos a raíz de la pandemia del coronavirus. Estos trabajadores seguirán contando con cobertura de salud por lo menos hasta mayo. No obstante, Walmart, Amazon y CVS Health se encuentran entre una docena de grandes empresas que buscan contratar a casi 500.000 empleado en las próximas semanas, representando una redistribución importante en la fuerza laboral de EEUU, donde pequeñas y medianas empresas han reducido drásticamente su personal para sobrevivir al coronavirus.Precisamente, las entidades hipotecarias están preparándose para enfrentar una primera ola de impagos a partir del 1 de abril, con una estimación de 20.000 millones de dólares en préstamos comerciales que vencen esta misma semana. Minoristas, pequeños comercios y restaurantes ya han dicho que no van a poder costear sus alquileres del próximo mes, lo que es una amenaza para el mercado hipotecario comercial, con un valor aproximado de 3 billones de dólares. Mientras tanto, tras aprobar un paquete de alivio por valor de 2 billones de dólares la semana pasada, que incluye, además de pagos directos a los ciudadanos, ayudas y rescates a industrias, como las aerolíneas, la Administración Trump, los legisladores estadounidenses y un grupo de expertos trabaja ya en el próximo plan de estímulo. Las ideas que se barajan incluyen extender el paquete de la semana pasada para que los beneficios duren más, así como revisar posibles lagunas en la ley ya aprobada. En este sentido, Ahya estima que el estímulo fiscal ya aprobado y orquestado en poco más de una semana, elevará el déficit fiscal primario al 14% del PIB en 2020, asumiendo que no se aprueban más medidas. Esto supone el doble cuando se compara con el 7% del PIB en 2009, el nivel más alto desde la década de 1930. El déficit fiscal general aumentará a alrededor del 18% del PIB en 2020.