Son muchos los baches que se ha encontrado Ence en los últimos meses. Cuando iba encaminado a máximos históricos, récords de beneficios y expansión a otros negocios, un conflicto judicial sobre su planta de Pontevedra, la guerra comercial y, sobre todo, la fuerte desaceleración que está sufriendo la economía global, ha dado al traste con cualquier previsión que pudieran haber hecho. Esto se ha reflejado en su desplome en bolsa este año -cerca de un 35%- y en la caída de las previsiones de beneficios. Por lo tanto, a los problemas propios se han unido los del sector, que está sufriendo el fuerte retroceso de los precios de la celulosa, que en menos de un año ha pasado de cotizar en los 1.050 dólares por tonelada métrica a hacerlo en los 700 dólares actuales. "A pesar de que esperamos una recuperación del precio en próximos meses, la incertidumbre sigue siendo elevada y no descartamos ver el precio incluso más abajo a corto o medio plazo si el entorno macro sigue debilitándose", apuntan desde Banco Sabadell.
No obstante, "el riesgo de una caída adicional significativa estaría limitado por la poca diferencia de precios que ya hay con los de China y que los niveles en el gigante asiático ua se encuentran muy por debajo de la media de los últimos 10 años", añaden desde la entidad catalana.