Al cierre de la sesión los índices han cerrado lejos de los mínimos intradía lo cual ha permitido que en muchos casos se desplieguen líneas de vela que en el argot técnico oriental se conocen como martillo. Estas velas, que son potencialmente alcistas, han servido para reforzar la zona de soporte que presenta el Ibex 35 en los mínimos que estableció la semana pasada en los 10.600 puntos, de cuyo mantenimiento depende que no se cancele la posibilidad de que la consolidación esté enmarcada dentro de una figura triangular. Si esto es así no veremos la pérdida de los 10.600 puntos y la confirmación de que la tendencia alcista de los últimos meses podría reanudarse la tendremos si se superan resistencias que ya pueden bajarse de los 11.000 a los 10.900 puntos.