
Las autoridades chinas planean proponer que el déficit fiscal de este año se mantenga en 3% del producto interno bruto, sin variación respecto a 2016, de acuerdo con fuentes familiarizadas con la materia, lo que apunta a una mayor tolerancia frente a una expansión económica más lenta.
El déficit de presupuesto, normalmente anunciado en marzo, requiere la aprobación de la Asamblea Popular Nacional de China y está sujeto a cambios, de acuerdo a las personas, que pidieron no ser identificadas porque la propuesta no es pública. El Ministerio de Finanzas no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios enviada por fax.
Muchos economistas habían previsto que la brecha aumentaría en 2017, fortaleciendo la capacidad de las autoridades para apuntalar la economía con política fiscal. Una decisión de mantener el déficit en 3% del PIB haría eco de declaraciones hechas por líderes chinos el mes pasado de que pondrán un mayor énfasis este año en reducir los riegos financieros, incluso si eso afecta el crecimiento.
El ratio de déficit de China ha escalado cada año desde 2012, mientras que los economistas esperaban que ascendiera nuevamente este año a 3,5%, de acuerdo a la mediana de las estimaciones de un sondeo realizado por Bloomberg.
Al mismo tiempo, las autoridades chinas también tienen otras herramientas no relacionadas con el presupuesto, como usar la emisión de bonos por bancos propiedad del estado para financiar proyectos de construcción. El ratio de déficit fiscal de China podría haber superado el 10% si tomamos en cuenta ese gasto, según economistas de UBS Group AG y JPMorgan Chase & Co.
Tras una conferencia anual el mes pasado para debatir la política económica para el próximo año, líderes chinos emitieron una declaración diciendo que controlar los riesgos financieros para evitar burbujas de activos sería una prioridad, junto con una reforma estructural en el lado de la oferta.
Las preocupaciones sobre los riegos financieros también han contribuido a que se haga una pausa en los recortes a los tipos de interés y requerido reservas para bancos comerciales, lo cual a su vez ha aumentado la importancia de la política fiscal para estabilizar a la economía.