
El Producto Interior Bruto (PIB) de Japón cayó un 1,8% entre abril y junio con respecto al trimestre anterior, debido al aumento del impuesto sobre el consumo, según los datos publicados por el Gobierno nipón, que revisan a la baja la evolución de la economía. En concreto, los nuevos datos muestran una contracción de una décima más sobre la primera estimación, publicada a mediados de agosto.
El descenso es el mayor desde que el país resultara golpeado por el terremoto y tsunami de 2011, y se debe principalmente a la subida del IVA, que pasó del 5 al 8% el pasado 1 de abril y frenó la demanda interna.
En términos interanuales, la contracción del PIB nipón fue del 7,1%, frente al 6,8% publicado inicialmente.
Caída del consumo
La revisión a la baja se debe a una caída del consumo interno mayor de lo previsto, así como a una bajada de la producción industrial durante abril-junio, el primer trimestre del año fiscal nipón.
En junio, el desembolso medio de cada hogar con dos o más ocupantes cayó un 3% en términos interanuales. En los dos meses anteriores, este indicador, considerado clave para evaluar la tendencia del consumo privado, había descendido un 3,9% y un 4,6%.
La producción industrial, por su parte, cayó un 3,3% en junio respecto al mes precedente, el mayor retroceso en los últimos tres años.
A su vez, a inversión en capital de las empresas disminuyó un 5,1% en abril-junio, más del doble de lo inicialmente estimado por el Gobierno.
La revisión a la baja del PIB podría hacer que el Ejecutivo liderado por Shinzo Abe se replantee el aumento adicional del impuesto sobre el consumo previsto para el año que viene, así como la posibilidad de aplicar estímulos económicos adicionales, según los analistas nipones.