Berlín, 25 oct (EFECOM).- El gobierno alemán espera una ralentización del crecimiento económico para 2008, pero considera que el camino de la recuperación tiene una base sólida y que además, según aseguró el ministro de Economía, Michael Glos, éste viene repercutiendo positivamente sobre el mercado laboral.
Las previsiones económicas del Gobierno alemán, presentadas hoy por Glos, parten de un crecimiento económico del 2,4 por ciento este año y del 2,0 por ciento en el próximo.
Los pronósticos implican una ligera revisión al alza de la última previsión para 2007, del 2,3 por ciento, y una revisión a la baja de la de 2008, que se había calculado anteriormente en el 2,4 por ciento, pese a lo cual Glos se mostró optimista, sobre todo por los efectos que la recuperación económica está teniendo en el mercado laboral.
"El número de desempleados registrados bajará en 2007 en 700.000 personas y en 2008 en otras 295.000, con lo que quedará en menos de 3,5 millones. Esa será la cifra más baja en más de diez años", aseguró Glos al presentar las previsiones económicas del gobierno.
Glos resaltó que, en el pasado, el desempleo crecía en épocas de crisis coyuntural y no disminuía en épocas en que la coyuntura era buena, por lo que el descenso que viene observándose es un éxito importante y una confirmación de la línea reformista del gobierno.
"En el pasado, en malos tiempos el número de desempleados crecía sin que descendiera de la misma manera en buenas épocas. En este auge, en cambio, estamos en camino de reducir el paro permanente", dijo Glos.
"Eso es un indicio claro de que nuestra política económica es acertada", dijo el titular alemán de Economía.
El ministro rechazó además las propuestas de algunos sectores para introducir modificaciones en algunas de las reformas de la llamada Agenda 2010, especialmente en la reforma laboral, que, según el ministro, ahora están dando frutos claros.
Por otra parte, Glos dijo que el crecimiento alemán en este año ha estado sustentado ante todo en la demanda interna.
El año próximo, agregó el ministro, la economía mundial perderá dinamismo con lo que el crecimiento deberá apoyarse otra vez en la demanda interna alemana.
En términos generales, Glos subrayó que, pese a la ralentización que se espera para el año próximo, el crecimiento continuará y la coyuntura alemana se apoya sobre una base estable, pese a las recientes turbulencias en los mercados financieros internacionales.
Esas turbulencias, generadas sobre todo por la crisis inmobiliaria en Estados Unidos, al lado del alto precio del petróleo y de la fortaleza del euro son las razones por las que el gobierno ha resuelto revisar a la baja su pronóstico de crecimiento para 2008.
Glos aseguró que ante todo la crisis inmobiliaria todavía no está superada y que, pese a los datos positivos internos alemanes, la situación internacional obliga a considerar crecientes riesgos coyunturales.
La inflación, que en este año alcanzará, según los pronósticos, el 2,1 por ciento, fue calificada por Glos como algo que "no es alarmante" sobre todo por considerar que ésta se ralentizará en los próximos años.
Los mayores riesgos inflacionarios, según Glos, son el precio del gas y de la energía y los precios internacionales del petróleo.
Los principales institutos de estudios económicos alemanes, que presentaron sus previsiones conjuntas la semana pasada, son un poco más optimistas que el gobierno pero comparten la idea de que en 2008 se producirá una ralentización.
Para 2007, los institutos esperan un crecimiento económico del 2,6 por ciento y en 2008 del 2,2 por ciento.
Al igual que el gobierno, los institutos consideran que la coyuntura alemana es robusta y que la recuperación continuará, pese a los riesgos coyunturales.
También en los pronósticos sobre la reducción del desempleo los institutos coinciden con la tendencia del gobierno y creen que el número de parados bajará en 2008 a 3,45 millones.EFECOM
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