Ofrecido por:

Economía

Ronda Doha busca introducir equidad en la globalización, según Pascal Lamy

Pekín, 20 jun (EFECOM).- La Ronda de Doha es fundamental para lograr equidad en la globalización, "algo que interesa cada vez más a la opinión pública", dijo hoy en Pekín el director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Pascal Lamy.

"Cada vez más actores no comerciales, como la sociedad civil, discuten sobre los valores en la OMC, sistema aunque no perfecto de control de la globalización, soluciona litigios a través de reglas, y donde la gobernabilidad puede encontrar su espacio", afirmó Lamy en el encuentro internacional de Consejos Económicos y Sociales.

Los Consejos, que celebraron su décima reunión en la capital china con la participación también del Consejo Económico y Social (CES) español, presidido por Marcos Peña, agrupan a representantes de empresarios, sindicatos y organismos de la sociedad civil, y son órganos de consulta y reflexión social bajo trámite parlamentario.

Los participantes españoles en esta sesión presidida por China (Brasil presidirá la próxima) destacaron la importancia del manejo de la globalización, "buena o mala según se gobierne", de los derechos humanos esenciales, de la apuesta por la tecnología digital y de la cooperación sur-sur, dijo Peña a Efe.

Lamy reconoció hoy que la globalización mejoró la situación de millones de personas, pero también empeoró la de otros muchos más, "pues su aceleración tiene actualmente un efecto más duro en el tejido social que en anteriores etapas".

Debilitó especialmente, dijo, la situación de las poblaciones más débiles tanto en los países en desarrollo como desarrollados.

Durante su visita a Pekín, el director general de la OMC intentó impulsar las negociaciones de la Ronda de Doha porque, según afirmó, uno de los mayores desafíos actuales es asegurarse de que los beneficios de la globalización lleguen a más personas.

Un informe publicado ayer por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) destacó el impacto negativo de la globalización en el empleo y los salarios de algunos países, e instó a los gobiernos a mejorar las regulaciones laborales y de protección social, pero también a adaptarse a las novedades.

Según Lamy, la Ronda de Doha, que se inició en 2001 y está bloqueada con posiciones enfrentadas sobre todo en lo que respecta a subsidios a la agricultura, persigue una globalización más justa.

EEUU, la Unión Europea, la India y Brasil intentan estos días en Potsdam (Alemania) relanzar las negociaciones suspendidas por el propio Lamy en julio pasado.

El director general recordó hoy en Pekín que "apertura comercial no siempre significa crecimiento económico y distribución justa de riqueza para todos".

"La liberalización no es suficiente para originar desarrollo sostenible y las medidas comerciales no son la panacea. Hay que completarlas con estructuras materiales y humanas que funcionen y que creen condiciones de igualdad en un clima político y social favorable", señaló.

"Además, se necesitan políticas de mercados que funcionen razonablemente, evitando monopolios y rigideces", concluyó.

En su viaje de cuatro días a la capital china, Lamy intentó reavivar las estancadas negociaciones de Doha, nombre de la ciudad en las que fueron lanzadas, y que, dijo, tienen como objetivo el desarrollo sostenido. EFECOM

pc/cg/ltm

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky